Extraña desaparición del "dossier" de Jaime Blanco en Santander

De los archivos de la comisaría de policía de Santander desapareció, días pasados, el dossier del diputado socialista Jaime Blanco, según publicó ayer en primera página la Hoja del Lunes de esta ciudad.La noticia, que se destaca como un Watergate en el Gobierno Civil, no ha sido desmentida ni por la secretaría particular del gobernador, Gabriel Peñaranda (siempre «reunido» cuando los redactores de la Hoja quisieron comentarle el hecho), ni por el comisario jefe, al que fuimos remitidos después de reconocer que «sí es cierto que han llegado rumores en ese sentido».

El comisario de Santander, más tarde, declararía: « Por razones obvias de secreto profesional no se puede facilitar ningún tipo de información al respecto», añadiendo que «si se tuvieran noticias de una desaparición semejante, se abriría el consiguiente expediente administrativo al responsable».

«Compréndalo -añadió el comisario jefe-, si yo le digo que ha desaparecido ese dossier, estaría reconociendo que existe, y estas cosas son secretas, así que no me pida cosas que bajo ningún concepto puedo yo servirle.»

Las fuentes informativas de Hoja del Lunes son, al parecer, de toda garantía y, a mayor abundamiento, el corresponsal de EL PAIS ha podido confirmar también esta desaparición, al menos temporal, del dossier Jaime Blanco, a instancias presumiblemente de quien tiene facultades para consultarlo. Dicho secuestro, que ha causado profundo malestar entre los propios profesionales de la policía, coincidió, por otra parte, con la aparición en El Alcázar del certificado médico que eximió al diputado santanderino de cumplir el servicio militar, por «enfermo epiléptico agresivo». La Capitanía General de Burgos, depositaria lógica de estos documentos, ya desmintió en su día que tuviera nada que ver con la filtración

«Antes te sacaban un historial político, ahora te buscan un historial médico, y además íntimo.» Con estas palabras ha comentado el doctor Jaime Blanco la desaparición de su dossier. El doctor Jaime Blanco, que es jefe de sección de los servicios postoperatorios del centro médico Marques de Valdecilla, ha calificado de «ciencia-médica-ficción» la interpretación que se hace a ese certificado médico.

«Efectivamente -dijo-, no hice el servicio militar por entrar dentro de las causas de exclusión. Fue a los diecisiete años cuando tuve una sintomatología que clínicamente registraba trastornos de tipo encefalográfico que pueden darse hasta en individuos que desconocen su enfermedad. Desde entonces, ningún otro síntoma. Lo mío es totalmente leve y normal. He hecho y hago una vida normal. En mi carrera de Medicina obtuve matrículas, fui becado y acabé la licenciatura con sobresaliente. Nunca tuve ningún altercado público.»

«El responsable de ese secuestro es -ha declarado- el Ministerio del Interior y el Gobierno. Este no se ha atrevido a dar el certificado médico a ningún periódico responsable de su profesionalidad y se lo ha cedido a El Alcázar, que, es ta vez, no ha sido el órgano de prensa de los ex combatientes, sino el órgano informativo del partido gubernamental.»

Ni esquizofrénicos ni mongólicos

Consultado sobre la amenaza que pesa sobre su escaño por la moción de indignidad que algunos diputados de UCD piensan plantear por las declaraciones que hizo en los pasillos de las Cortes («si yo soy esquizofrénico, aquí hay 168 mongólicos»), el diputado socialista de Cantabria declaró ayer a Hoja del Lunes que «la frase es condicional y sólo implicaría insulto en el caso que ellos me consideraran a mi esquizofrénico», Ni ellos, pienso, me catalogan, ni yo considero que los de UCD son mongólicos». «Los diputados centristas -añadió Blanco- merecen todos mis respetos.»