El "Niño de Aranjuez" aún es una promesa

El Niño de Aranjuez tomó la alternativa, con ganado a modo, del dulce que exigen las figuras. Lo malo ha sido que su actuación no ha pasado de aseada. Tal o cual pincelada de torero fino, permiten seguir con la esperanza de que cuaje en torero de arte. Clase tiene, pero es muy frío. De capote toreó con más estilo que quietud, y al sexto le dio media verónica buena Con el toro de la alternativa pecó de llevar encogido el brazo y de citar de costadillo. Hizo toda la faena sobre la derecha, y no pasó de aseado pero vulgar. En el sexto hubo un gran trincherazo en los medios con la. mano izquierda. Y realizó una labor limpia, con templados derechazos y naturales, pero faltó ligazón. Acabó con unos toreros muletazos a dos manos, por bajo y por alto. Con la espada estuvo breve, aunque se queda en la cara y sale apurado de la suerte. El nuevo matador de Aranjuez sigue de promesa; veremos si cuaja.Lo mejor de El Viti, con toritos a modo, fue un sensacional muletazo por bajo a su primero. Con el cuarto, también justo de fuerzas, estuvo fácil, técnico y frío. Faena aseada con derechazos muy templados, todos faltos de inspiración y, por supuesto, de emoción. Mató a los dos de media estocada entrando por fuera. Palomo Linares está más reposado, menos violento, sigue con su pico de muleta y en sus trasteos manda la cantidad sobre la calidad. Al tercero lo toreó de capote con variedad. La faena, larga, tuvo momentos de calidad en algunos derechazos, dos de trincheras y uno de pecho de pitón a rabo. Con el sobrero de Jiménez estuvo anodino y vulgar, porfió inútilmente y no dominó las asperezas, producto de la falta de fuerzas, por otro lado.