China ensalza la independencia yugoslava frente a la URSS

Unas 100.000 personas tributaron ayer en Pekín un apoteósico recibimiento al presidente de Yugoslavia, Josip Broz Tito, que ha iniciado su primera visita oficial a la República Popular de China. Fue recibido en el aeropuerto-por el presidente chino Hua Kuo-feng y otros cuatro miembros del Politburó chino.Las calles de Pekín, por donde pasó el cortejo con los dos presidentes, estaban engalanadas con banderolas. Los chinos bailaban y cantaban al paso de la caravana y en numerosas pancartas se expresaba el apoyo a- los, países que como Yugoslavia, «luchan contra el expansionismo sovietico».

El mismo día de la llegada del mariscal Tito, el Diario del Pueblo dedicó un editorial a su visita, en el que dirige las habituales y duras críticas a la Unión Soviética. «Estamos convencidos, dice el editorial de que cualquiera que trate de impedir la independencia de Yugoslavia, puede estar seguro de que saldrá mal parado.»

El citado periódico ensalza la política del presidente yugoslavo, quien en el decenio de los años 60 era presentado en la República Popular de China como un traidor al comunismo. Ahora, por el contrario, es calificado de importante dirigente respetado en todo el mundo.

Esta primera visita del presidente yugoslavo a Pekín ha supuesto una mejora de las relaciones entre los dos Estados. Los chinos están poniendo de relieve su admiración ante la política de independencia hacia Moscú que realiza Belgrado. Así, los, chinos consideran que el hecho de que Tito visite Pekín después de, haber estado en la Unión Soviética y Corea del Norte, constituye un testimonio de la independencia de Yugoslavia ante las dos grandes potencias del comunismo internacional,

Los comentaristas señalan que uno de los objetivos del mariscal Tito en su actual periplo es, precisamente, estabilizar las relaciones de Yugoslavia con el mundo comunista, ante el incierto futuro que le plantea a este Estado el tema de la sucesión en la Presidencia.