La mujer, manipulada
El equipo gubernamental recientemente designado por el presidente Suárez no puede tildarse de democrático precisamente, pues no puede calificarse como democrático un Gobierno en el que aparece ignorada la mitad del contingente humano, el contingente humano al que aludo es «la mujer". Cuando se margina o se prescinde de la mitad de la población no puede hablarse de democracia, dándole a esta palabra su auténtico sentido. ¿O es que vamos a escindir nuestra sociedad en democracia para hombres y democracia para mujeres? A la hora de contabilizar su votoja mujer sí cuenta; a la hora de ser elegida para un cargo de responsabilidad, no; lo cual revela que, una vez más, la mujer ha sido utilizada como elemento «fácilmente manipulable» en las pasadas elecciones, para engrosar la votación de la UCD e incluso para dárle el triunfo, pero para nada más.
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