"En los países del Este no se puede inspirar un modelo socialista"
«No creo que exista históricamente un modelo de sociedad socialista», dijo el lunes en Murcia el secretario general de la Federazione Giovanile Comunista Italiana (FGCI), Maximo D'alema, en el curso de una rueda de prensa. El señor D'alema se manifestó en este sentido al ser preguntado sobre la estructura social en los países del Este europeo en relación con la polémica surgida entre Moscú y los PC en torno al eurocomunismo.Maximo D'alema, que cuenta veintiocho años de edad, se encontraba desde hace unos días en España en visita turística. La rueda de prensa celebrada en Murcia fue a instancias de la Unión de Juventudes Comunistas de España (UJCE), con cuyos militantes trabó contacto fortuito el político italiano al sufrir una avería en la provincia de Murcia el automóvil en que viajaba con su esposa. Las deciaraciones que ofrecemos son las únicas que el señor D'alema ha hecho a la prensa en España, quien marchó ayer hacia Italia.
Preguntado sobre la actitud de la juventud comunista italiana ante el eurocomunismo, el señor D'alema señaló que su organización participa totalmente de los criterios políticos y los principios del PCI, subrayando que la denominación eurocomunismo no es debida a ningún comunista y que en Italia desde hace tiempo esta forma de actuación se viene denominando vía italiana al socialismo. "En sustancia -añadió-, esta política consiste en que el socialismo se debe construir en el ámbito de la democracia política y concretamente en Italia en el marco de las instituciones democráticas establecidas. »
Maximo D'alema se mostró muy prudente al referirse a los países del Este europeo cuando fue preguntado sobre el tema. Dijo que no se puede dar un juicio abstracto sobre los mismos e hizo constar que «son sociedades en las que se han realizado algunos de los objetivos socialistas tradicionales, como la eliminación de la propiedad privada de los medios de producción, junto a grandes conquistas sociales en el ámbito de los derechos colectivos, como el derecho al trabajo y a la asistencia.
Vemos a estos países -dijo refiriéndose a los del Este- como sociedades en las que no se puede inspirar un modelo socialista.»
Con referencia al avance del PCI en los últimos tiempos, el señor D'alema dijo que «ha sido el partido que más se ha hecho eco de las necesidades de todo el pueblo frente a una gran crisis económica y social, pues ha sostenido una política más encaminada a resolver los problernas del país que a beneficiar sus intereses de partido».
En otro orden de cosas, Maximo D'alema fue preguntado acerca de los motivos que habrían conducido a los dirigentes soviéticos a atacar concretamente al PCE y no a otro partido comunista occidental. Señaló como hipótesis que seria debido a la trascendencia que ha tenido el análisis de Carrillo sobre la URSS en su libro Eurocomunismo y Estado. También dijo que quizá la Unión Soviética habíajugado una política de potencia, al atacar a un partido comunista con menor peso político que el italiano.
Finalmente, y acerca de Santiago Carrillo, el señor D'alema dijo que «es un hombre de gran talla política que ha sabido afrontar con mucha inteligencia la situación política española en unas circunstancias poco fáciles».
