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Acusaciones de Angola contra los servicios de espionaje occidentales

El Gobierno de Luanda acusa a las «agencias de espionaje del imperialismo, particularmente las de Francia y algunos de sus aliados europeos» de complicidad en los acontecimientos del pasado 27 de mayo. La acusación está formulada en un largo documento del Buró Politico del MPLA, divulgado en Luanda el 12 último, y ahora ampliamente reproducido por la prensa portuguesa.

Se trata de la primera versión oficial de los hechos que costaron la vida a varias decenas de dirigentes del MPLA, entre los cuales figuran algunos de sus más prestigiosos militares.El MPLA pormenoriza la trayectoria político-ideológica del «grupo fraccionista» Nito Alves-Van Dunen, al que estigmatiza con acusaciones que van desde «concepciones elitistas pequefloburguesas» hasta «verbalismo basado en lecturas superficiales de textos de Lenin», pasando por la adhesión a «las tesis de Enver Hodja» divulgadas por «grupúsculos portugueses» y a «las de Mao Tse-tung sobre la revolución china».

Es muy notable el cuidado puesto en deshacer las sospechas levantadas, particularmente en los medios occidentales, de participación en el golpe frustrado contra Agostinho Neto, del Partido Comunista portugués y de los soviéticos presentes en Angola.

Entre tanto, viajeros llegados de Angola en los últimos días afirman que el Gobierno de Luanda consiguió una gran victoria sicológica. Después del aplastamiento de la rebelión, el abastecimiento de la capital ha mejorado de manera espectacular. Los géneros no abundan, pero los mercados son regularmente abastecidos en carne , pescado y hortalizas, y el puerto de Luanda está funcionando a un ritmo hasta ahora desconocido.

Aún no se sabe cuál será la suerte final de Nito Alves. Agostinho Neto ya anunció`-que «no se perdería tiempo con un juicio normal», y parece confirmado que los autores materiales de los asesinatos de dirigentes del MPLA fueron pasados por las armas inmediatamente después de su captura.- Fue el caso de «Monstro imortal»Jefe de estado mayor de las FAPLA. De Nito Alves, las autoridades angolanas parecen empeñadas en obtener una confesión completa que permita una depuración de todos los cómplices y, sobre todo, el desmantelamiento de las bases de la «conjura internacional».

Por otro lado, en un comunicado conjunto, los Gobiernos de Luanda y Lisboa han solicitado el apoyo del secretariado de la ONU para los refugiados, con el fin de organizar el regreso a Angola tan rápidamente como sea posible, de los 11.000 angoleños que se encuentran en Portugal y han manifestado su deseo de volver a su país de origen. Pero mientras tanto continúan llegando al aeropuerto de Lisboa decenas de personas expulsadas de Mozambique por haber rechazado adoptar la nacionalidad mozambiqueña. Estos nuevos refugiados, entre los cuales una mayoría son de origen hindú o paquistaní, tienen dificultades para probar su nacionalidad portuguesa, y, están causando graves problemas a las autoridades portuguesas.

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