Con la derrota del PSOE y el PCE, el ejecutivo podrá gobernar por decreto-ley

El Gobierno Suárez se aseguró ayer la posibilidad de gobernar por medio de decretos-leyes, al conseguir el partido gubernamental de la Unión de Centro Democrático (UCD) derrotar en el Congreso las propuestas del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y del Partido Comunista de España (PCE) en el sentido de modificar las votaciones para la elección de los miembros de la comisión de urgencia legislativa, con el fin de que en la misma estuvieran presentes las minorías.

La batalla planteada desde el primer momento en el Congreso por el PSOE y el PCE se centraba en la modificación de las normas provisionales de la Cámara, de modo que el partido gubernamental no consiguiera la mayoría en una de las comisiones más importantes del Parlamento; la de urgencia legislativa, ya que una de sus competencias es decidir qué proyectos de ley pueden dictarse por medio de decreto-ley, sin necesidad de tener que ser aprobados por el Parlamento.Las normas provisionales, apoyadas por la UCD, establecían que el Congreso debía elegir cuatro miembros de la comisión, escribiendo cada parlamentario tres nombres en la papeleta de votación, lo que equivalía en la práctica el copo de la comisión por parte del partido mayoritario. Tanto el PSOE como el PCE presentaron sendas mociones modificando estas normas.

La propuesta del PCE -cuatro miembros designados por los cuatro grupos parlamentarios con mayor número de diputados- fue derrotada por 169 votos en contra, 140 a favor y veinte abstenciones. En esta primera votación -en la que se abstuvo el grupo minoritario vasco-catalán, mientras el PSOE y el PSP apoyaban la propuesta del PCE- pudo comprobarse lo que se demostraría más tarde en la elección de los miembros de la comisión: que la UCD había pactado con la minoría vasco-catalana para que ésta no apoyara las modificaciones propuestas por PCE y PSOE y al mismo tiempo que el centro le aseguraba un puesto en la comisión.

La moción del PSOE -votación de dos nombres en vez de tres- también fue derrotada por 186 votos en contra, 133 a favor, y ocho abstenciones. En esta ocasión, la minoría vasco-catalana no sólo se abstuvo, sino que votó en contra junto a la UCD y Alianza Popular, mientras el PCE apoyaba al PSOE y el PSP se abstenía.

La minoría vasco-catalana conseguía así colocar un hombre suyo en la comisión de urgencia, Joaquín Arana, del Pacte Democrátic de Catalunya (que obtuvo 189 votos, de los 343 emitidos), mientras que la UCI) se marcaba el tanto de apoyar a las minorías y conseguía también dos puestos en la comisión con José Pedro Pérez Llorca (185 votos) y José Miguel Bravo (184 votos). El cuarto elegido votado en solitario por el PSOE, PCE y, presumiblemente el PSP, fue Manuel María Chaves, del PSOE ( 144 votos). Votaron en blanco 17 diputados.

Intervenciones de Carrillo y Peces Barba

Abierta la sesión a las once y cuarto de la mañana por el presidente del Congreso, Fernando Alvarez de Miranda, se procedió a dar lectura de los grupos parlamentarios constituidos y seguidamente, el presidente informó que de acuerdo con el orden del día fijado en la reunión que momentos antes había tenido la mesa de la Cámara con los portavoces de los grupos parlamentarios, se pasaba a leer, para su posterior debate las mociones del PCE y del PSOE.

La propuesta del PCE fue defendida por Santiago Carrillo, quien comenzó diciendo: «Es imprescindible y elemental modificar esta norma, si queremos que esta democracia sea parlamentaria y no teledirigida y controlada por el propio Gobierno o por el grupo mayoritario, en detrimento de los intereses de las minorías parlamentarias. »Propuso que la UCD, el PSOE, la minoría vasca-catalana y el PCE designaran sus representantes en el Congreso. Terminó su intervención llamando la atención a la UCD por si este grupo creía que las minorías parlamentarias tenían escaso espíritu de responsabilidad nacional. «Creo que estas Cortes -afirmó- están dando muestras de su sentido de la responsabilidad.» «Señores del Gobierno y de la UCD -concluyó Carrillo-, si rechazan estas mociones el país va a tener la impresión de que quieren seguir gobernando como se ha gobernado hasta ahora. »

La moción del PSOE fue defendida por Gregorio Peces Barba, quien afirmó que el espíritu de su propuesta era la defensa de las minorías. Señaló que al igual que en las votaciones para secretarios -que para elegir cuatro se votaron dos-, el PSOE proponía que se votaran sólo dos. « Es una tradición desde la aparición de los regímenes parlamentarios la de limitar al poder. Nuestra moción está inspirada en dar facilidad a las minorías para acceder a este control. »

En el turno intervención del PSOE intervino José Pedro Pérez Llorca, por la UCD, afirmando que su fórmula era la única que podía dar acceso a las minorías y que el Gobierno para gobernar necesitaba tener el apoyo parlamentario de la comisión de urgencia.

Finalizadas estas intervenciones y su respectiva votación se pasó a la elección de los cuatro miembros de la comisión, y seguidamente el presidente levantó la sesión hasta las seis de la tarde.