El ministro de Trabajo recaba de USO su opinión sobre el programa económico
Dentro de los contactos que el ministro de Trabajo, señor Jiménez de Parga, viene manteniendo con las centrales sindicales y las organizaciones empresariales para recabar la opinión de estos sectores sobre las medidas económicas anunciadas por el Gobierno, en la mañana de ayer se entrevistaron con el titular de Trabajo varios miembros de la Unión Sindical Obrera.
En el curso de la entrevista, que se extendió por espacio de dos horas y media, se abordó el programa económico del Gabinete, sobre el que los representantes de USO -según un comunicado facilitado por esta central- hicieron patente la necesidad de que las medidas concretas guarden una coherencia global en aquellos aspectos que más directamente afecten a los trabajadores: política salarial, control de precios de los productos de consumo básicos, lucha contra el paro, política fiscal, reforma de la Seguridad Social, lucha contra la especulación del suelo, etcétera.La delegación de USO urgió una atención prioritaria a los problemas de los casi cuatro millones de pensionistas, e hizo entrega al ministro de un documento con las alternativas que esta central propone al respecto.
Asimismo, la delegación de USO planteó al ministro la necesidad urgente de derogar la legislación en vigor sobre el despido libre y el derecho de huelga, así como el adoptar medidas encaminadas a hacer efectiva la amnistía laboral, empezando por las empresas propiedad del Estado.
En lo relativo a la nueva legalidad en la empresa, ambas partes coincidieron -siempre según el comunicado de USO- en la necesidad de continuar las negociaciones entre el Gobierno y las centrales con vistas a la elaboración de un proyecto de nuevo marco legal que responda a Los intereses de centrales y trabajadores.
En este sentido, USO planteó al ministro la urgente celebración de elecciones sindicales libres en las empresas para finales de octubre o principios de noviembre.
Asimismo, USO se interesó sobre el desarrollo del decreto que reconoce la libre sindicación de los funcionarios públicos y, en esta línea, expusieron la necesidad de que dicha norma legal garantice el libre ejercicio de ese derecho y la adscripción de los sindicatos de funcionarios a las centrales obreras.
Respecto al tema del patrimonio sindical, ambas partes coincidieron en la necesidad de inventariar lo y de abrir un proceso de negociación que garantice la puesta al servicio de los trabajadores de derecho patrimonio, con la gestión de las centrales. De forma inmediata, se vio la necesidad de articular unas normas provisionales que regulen la utilización de los locales sindicales por las centrales democráticas. Por su parte, el ministro de Trabajo, en unas declaraciones concedidas a Radiotelevisión Española al término de la reunión, explicó que las centrales, durante las entrevistas que con ellas ha mantenido en los últimos días, se vienen manifestando abiertamente y están a la espera de conocer los detalles de la declaración económica del Gobierno.
« Estoy manteniendo contactos, diálogos, con los representantes en busca de una línea de entendimiento, y confío en que las centrales sindicales se den cuenta de la gravedad del momento de la economía española y de la necesidad de que todos hagamos el correspondiente sacrificio, lo que no quiere decir que ese sacrificio tenga que recaer sobre un solo sector, sino que tendrá que ser distribuido de una forma más justa, es decir, que quienes tienen más soporten más, y los que perciban menos ingresos sufran menos ese sacrificio necesario.»
Hasta ahora se han entrevistado con el ministro para tratar de estos temas, además de los representantes de USO, delegaciones de UGT y CCOO. El Sindicato Unitario, por su parte, ha solicitado una entrevista con el señor Jiménez de Parga «al objeto de conocer y discutir el alcance real de las medidas que se pretenden tomar».
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