Claude François,
cantante francés, considera milagroso haber salido ileso de un atentado que sufrió el pasado fin de semana. Cuando regresaba en coche a si su domicilio, situado en Milly-la Foret, a unos sesenta kilómetros de París, conduciendo su automóvil, en el que viajaban otras cuatro personas, fue ametrallado desde un vehículo que le seguía y que desapareció rápidamente. Ninguno de los cinco ocupantes del coche sufrió el más pequeño rasguño, ni siquiera de rebote de bala. El vehículo recibió once impactos de bala, el cristal posterior quedó hecho añicos y el parabrisas, estriado y perforado.
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