Nuevos atentados contra el periodismo

Los grupos terroristas italianos continúan con su campaña de intimidación a la prensa. Emilio Rossi, director de los servicios de la primera cadena de la televisión, fue herido ayer en las piernas por disparos efectuados por un hombre y una mujer armados con pistolas dotadas de silenciador. El atentado se perpetró en el instante en que Rossi se disponía a entrar en el edificio de la RAI (Radiotelevisión Italiana).Este ha sido el tercer atentado en 36 horas contra un profesional conocido del periodismo local. Sus características han sido similares a las de los ataques llevados a cabo, anteayer contra el director de Giornale Nuovo, Indro Montanelli, y el subdirector de Il Secolo XIX, Victorio Bruno, reivindicados por las Brigadas Rojas, organización ¡le extrema izquierda.

En una declaración hecha pública en la noche del jueves al viernes, las Brigadas Rojas anunciaron que con los atentados contra Montanelli y Bruno comenzaba una «acción» contra los periodistas italianos, que «diariamente producen -dijeron- material de propaganda contrarrevolucionaria por medio de la prensa».

En un mensaje aparecido en una cabina telefónica de Milán, las Brigadas afirman que los periódicos del país han puesto en marcha «un sutil plan de guerra sicológica» para «combatir al comunismo en todas sus formas».

Tras resultar herido -en la ingle y también en las piernas-, Moranelli declaró en Giornale Nuovo que «los agresores se equivocan si creen que así conseguirán taparles la boca» a los hombres de prensa.

En las últimas horas la policía descubrió dos bombas en los automóviles de otros tantos periodistas, en Liorna y Florencia. Las bombas pudieron ser desmontadas antes de que estallaran.

El ministro del Interior, Francesco Cossiga, manifestó ayer que esta nueva ola de terrorismo «no intimida al Gobierno», aunque no existen -añadió- «soluciones a corto plazo».

Poco después, dos desconocidos quemaron un furgón que transportaba ejemplares del matutino Corriere Della Sera.