El canciller austríaco
Bruno Kreisky, aceptó ayer la dimisión de su ministro de Defensa, Karl Luetgendorf, quien había sido acusado ante el Parlamento de ocultar información sobre la venta de material militar austríaco a Siria, con lo que se podía poner en peligro la neutralidad «permanente» de esta nación centroeuropea. Kreisky declaró que el ministro había sido encontrado culpable por una comisión negociadora.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
