Portugal: socialdemócratas y centristas preparan la batalla final contra Soares
El próximo miércoles, las direcciones políticas de los partidos Social Demócrata Portugués (PSD) y Centro Democrático y Social (CDS) se reunirán en Lisboa, para continuar la actividad política desplegada por la oposición, desde el pasado fin de semana, y que sería un claro anuncio de la ofensiva final contra el Gobierno que preside el líder socialista Mario Soares.
Tras las consultas que hicieron, por separado, con el presidente de la República, Ramalho Eanes, el socialdemócrata Francisco Sa Carneiro y el centrista Freitas do Amaral coinciden en la conveniencia de reunirse para estudiar una plataforma común.A pesar de la incapacidad del Gobierno por resolver los problemas más acuciantes del país, los socialistas han desoído el llamamiento de Eanes, del pasado 25 de abril, para que se propiciara un encuentro entre «partidos democráticos» (con exclusión de los comunistas). Ante esta negativa, socialdemócratas y centristas han tomado la Iniciativa y así el periódico Comercio do Oporto, explicaba ayer a sus lectores que Freitas do Amaral había aceptado una invitación de Sa Carneiro para examinar conjuntamente una plataforma «de alternativa» al Gobierno. Sí ambos partidos deciden derribar el Gabinete, no les faltará oportunidad en los próximos debates parlamentarios, en los que contando con la abstención de comunistas y un voto de censura coaligado de socialdemócratas y centristas, el PS se encontraría en minoría con un 34 % de los votos.
Sin embargo, la dirección socialista aún trata de ganar batallas políticas, como ocurre en el terreno sindical, en el que el pasado domingo, en la ciudad de Portalegre, la comisión nacional del PS trató la «política sindical del partido», elaborando un documento en el que se ve con claridad la ofensiva para la creación de sindicatos «democráticos» que tratarían de romper la hegemonía de la Confederación General de Trabajadores Portugueses (CGTP), de mayoría comunista.
La nueva decisión, calificada por el ministro de Trabajo, Maldonado Gonelha, e inspirador de la ofensiva sindical, como histórica, no goza, sin embargo, del beneplácito de ocho dirigentes socialistas y socialdemócratas que abandonaron la reunión de Portalegre, a pesar de que ellos también se oponen a la central sindical única, aparentemente controlada por el Partido Comunista.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.