Carrillo, en Málaga: "El comunismo es compatible, con la Monarquía democrática"

"La sociedad española es la que menos razones tiene para preguntar acerca de la vocación o intención democrática del Partido Comunista de España. Sencillamente porque llevamos muchos años los comunistas luchando por conseguirla. Hasta hace muy poco toda la sociedad española o bien colaboró con el régimen de Franco o bien se mostró pasiva. Mientras, los comunistas trabajaban por la democracia» dijo ayer el secretario general del PCE, Santiago Carrillo, en una rueda de prensa celebrada en un céntrico hotel malagueño.

Numerosos militantes del partido con un brazalete rojo en el brazo ejercían un cuidadoso servicio de orden apostados en la puerta, en los pasillos, en las escaleras y en los ascensores.

Santiago Carrillo empezó por definir el concepto de eurocomunismo diciendo que es una tendencia comunista que surge en los países de capitalismo desarrollado, en los que sólo a través de la democracia es posible que se realicen las ideas socialistas únicas que pueden solucionar la crisis actual que no es otra cosa sino el agota miento de un modelo de vida política y económica. A la pregunta de si el eurocomunismo no acabará convirtiéndose en una socialdemocracia, dijo que eso es sólo una profecía que el tiempo se encargará de demostrar que es errónea. «Al decir que el eurocómunismo no se transformará en una socialdemocracia quiero decir que no se transformará en lo que los franceses definían como «gerente del capitalismo».

El secretario general del PCE dijo en contestación a una pregunta sobre la concesión ayer del pasaporte a Dolores Ibárruri qué era la primera noticia que tenía de ello y que esta noticia no tenía por que ser motivo de un seísmo.

«Pensamos -dijo en otro momento- que hay que organizar el Estado sobre el reconocimiento de los pueblos y las regiones que componen España y sobre la concesión de autonomías lo cual no va contra la unidad de España, la cual ha estado en peligro más que nunca en estos últimos cuarenta años de despotismo centralista.»

Repitió el señor Carrillo que el comunismo es perfectamente compatible con la Monarquía «siempre que ésta sea de mocrática.y constitucional. Finalmente hablando de sus choques dialécticos con el señor Fraga dijo que no tiene interés alguno en convertir la campaña en un juego de pelota. Lo que pasa -afirmó- es que Fraga vive demasiado vitalmente el pasado adaptando a sí mismo el lema aquél de «Franco o el co munismo». «Si hay algún mano a mano en este país -concluyó- será entre las fuerzas que quieren conservar el pasa do y las fuerzas democráticas.»