Dreyer y Woody Allen, en la Filmoteca

Continúan los ciclos dedicados a Luis Buñuel, Carlos Saura y Jean Rouch en una programación que por las circunstancias especiales de la semana reduce el número de sus proyecciones.De Buñuel se podrán ver Ensayo de un crimen, El Angel exterminador -uno de los filmes claves en el surrealismo- y Nazarín. El ciclo dedicado a Carlos Saura incluye en esta semana La madriguera y El jardín de las delicias. De Jean Rouch se ofrece La Chasse au lion á l'arc. Carl Theodor Dreyer y Woody Allen son los nombres propios que surgen en la programación de la Filmoteca. Del primero se ofrece Ordet y La passion de Jeanne dArc, en la que podemos contemplar a Antonin Artaud en su faceta de intérprete. De su obra escribió Jos Burnevich: «Tras los planos fijos que eran indispensables para la cámara de 1919 y en la que la mascarilla del obturador aislaba un personaje en el momento decisivo de una toma de conciencia, hasta los planos estáticos, pero tan luminosos de Ordel, donde la construcción misma, la concentración misma de luz y de sombra dibuja el personaje que toma una decisión o una postura, Dreyer ha permanecido fiel a un estilo en el cual se transparenta su personalidad: ningún movimiento gratuito de la cámara, ningún preciosismo, sino la contemplación intensa y segura, terrenal popular en el mejor sentido de la palabra.»

Woody Allen, quien para muchos es el eslabón más importante en la ya amplia cadena del «burlesque americano», con sus orígenes en el cine cómico mudo y su cenit en los Hermanos Marx, irrumpe con cuatro películas: Toma el dinero y corre, Sueños de un seductor, Bananas y La última noche de Boris Grushenko.

Las proyecciones aisladas tienen dos pilares en esta semana: A bigger splash, del británico David Hockney, filme experimentador y vanguardista, y Mai 1968, filme encuesta sobre los famosos y ya asimilados sucesos del mayo parisiense, realizado por Gudie Lawaetz.