El presidente Leone, acusado formalmente en relación con la Lockheed

Como un «bombazo» cayó anoche sobre el Parlamento italiano la noticia de que el Partido Radical ha presentado al presidente de la Cámara, Pietro Ingrao, un documento en el que se acusa al presidente de la República, Giovanni Leone, de implicación en un soborno de la Lockheed.

El tema no tiene nada que ver con los aparatos Hércules, sino con los Orion-P-3, aviones antisubmarinos que la Lockheed -trató de vender, sin éxito, a Italía en el año 1968. El negocio no llegó a buen término porque los franceses se adelantaron con su oferta de otros antisubmarinos, los Breguet Atlantic.El Partido Radical acusa a Leone -que era presidente del Consejo en la época a que se refieren los hechos- de «asociación para comisión de delito de corrupción, espionaje y otros delitos contra la seguridad del Estado».

Las mismas acusaciones van dirigidas contra el también ex presidente del Consejo Mariano Rumor y contra los ex ministros de la Defensa Luigi Gui y Mario Tanassi.

Se pide en el documento radical que se suspendan inmediatamente los debates sobre si Gui y Tanassi son culpables de corrupción por la compra de los Hércules a la empresa Lockheed, ya que, en su opinión, deben ser juzgados los cuatro por un delito mayor.

El diputado radical Luigi Mellini, que fue quien dio la noticia al Parlamento sobre la presentación de dichas acusaciones por miembros de su partido, reveló también que existen documentos sobre todo este asunto, pero no quisieron ser traducidos del inglés «porque no se consideraron importantes. »

Explica el documento radical que la Lockheed no logró su objetivo de vender a Italia dieciocho Orion porque los franceses se dieron mucha prisa en obtener la firma del contrato.

Respecto a esta «rapidez» -dos meses en todas las negociaciones- se indica, además, que la sociedad Europavia, encargada de la venta de los Atlantic, envió una letra por diez millones de liras (799.952 pesetas) a nombre de la esposa del entonces jefe del Alto Estado Mayor Aéreo, el general Duilio Fanali.

Se informa también en el documento que Leone llamó al ministro de la Defensa, Luigi Gui, para que se aceptara mejor la oferta de los americanos, pero éste respondió que «ya era demasiado tarde ».