Preocupación por la larga incomunicación de un estudiante detenido

Después de diecisiete días de incomunicación en el cuartel de la Guardia Civil de Bilbao, el padre del joven estudiante Aitor Argárate, detenido el 25 de enero en la localidad vizcaína de Berango, pudo entrevistarse con su hijo el pasado viernes por espacio de unos minutos.

Sobre Aitor Argárate -nacido en Elgóibar (Guipúzcoa), estudiante de primer curso de Ciencias en la Universidad de Bilbao- pesa la acusación de proyectar, junto con otra persona, la colocación de una bomba en el chalet de un industrial vizcaíno, para lo cual conminaron a un taxista a que les trasladase bajo la amenaza de una pistola.A partir de la detención, tanto su abogado corno sus padres han intentado inútilmente visitar al detenido hasta la fugaz,entrevista del viernes. De acuerdo con la ley antiterrorista, Aitor Argárate tenía que haberpasado a disposición judicial en un plazo de diez días, pero el 29 de enero -cuatro días después de su detención- quedaba en suspenso el artículo 18 del Fuero de los Españoles, que establece los períodos de detención preventiva.

Aunque el abogado señala que es práctica jurídicauniversal el que ninguna ley tenga aplicación retroactiva, si no es en beneficio del acusado, los hechos demuestran que la suspensión de garantías constitucionales ha sido aplicada al detenido.

La prolongada incomunicación ha originado paros entre sus compañeros de Facultad y una notoria tensión en la vida ciudadana de su pueblo natal, hasta el punto de que se había proyectado un encierro para ayer y se amenazó con una huelga general el lunes si no terminaba la incomunicación de Aitor Argárate. Empresarios, de Elgóibar mantuvieron conversaciones con el gobernador civil de Guipúzcoa y finalmente el padre pudo entrevistarse brevemente con su hijo, sin que a primera vista le apreciase lesiones físicas.