Indignación entre el personal de la residencia "Primero de Octubre"

El estado de los tres guardias civiles ingresados en la Ciudad Sanitaria Primero de Octubre seguía siendo muy grave, según el parte médico facilitado a las 6.30 de la tarde de ayer.El ambiente general del personal sanitario de la clínica era de total indignación ante lo ocurrido.

El conductor del coche, José Pérez Diañez, ingresó herido de bala en la región torácica izquierda con atrisción del pulmón izquierdo, diafragma y bazo. El bazo le ha sido suturado. Herida también en región lumbar izquierda, que ha sido saturada. Herida también en el brazo derecho y en el scalp occipital. Tras efectuarle la operación quirúrgica pasó a cuidados intensivos. El pronóstico es muy grave.

El estado del sargento Felipe Martín Margallo también es muy grave. Sufrió un estallido craneal con salida de masa encefálica, múltiples heridas en tórax y abdomen; heridas por metralla en extremidad inferior derecha y otra en la izquierda que secciona el vasto interno. A última hora de la tarde se le sometió a una intervención quirúrgica en el abdomen. En la cabeza tiene una herida que arrastra masa encefálica en la zona superficial del cerebro.

El número Antonio Guareño presenta heridas en el tórax'y hemotorax de 1.500 centímetros cúbicos, herida en la región inguinal derecha e izquierda. Múltiples heridas en la cabeza con hundimiento de hueso de cráneo. La herida de tórax penetra por la cara posterior, arrastra tejidos y fragmentos de costillas que se incrustan bajo el pectoral junto al fragmento metálico. El pronóstico es también muy grave.

Las habitaciones en las que se encuentran los tres heridos, desde su ingreso en la clínica, se encuentran fuertemente custodiadas por números de la Guardia Civil. Hacia las seis de la tarde, el director general de la Guardia Civil, teniente general Ibáñez, se personó en el centro para interesarse personalmente por los guardias heridos.