El Partido Comunista Español
«El Partido Comunista Español está considerado fuera del país como el pionero en su independencia de Moscú, siendo quizá,el comunismo europeo más avanzado, «comunismo con cara huríiaiia».Los españoles tendrán pronto oportunidad de dar el veredicio sobre el partido y sus candidatos. Entre éstos figura Carrillo, que piensa presentarse por Asturías y Madrid y que asegura que si hay un mínimo de libertad en las futuras elecciones será elegido en Madrid sin duda alguna.
Suárez sigue debatiéndose sobre la legalización del Partido Comunista, buscando quizá una fórmula de compromiso, como permitir candidatos del partido como individuales, sin legalizar éste.
Hace poco más de un año desde la muerte de Franco y los españoles aceptan la posibilidad de que en un futuro,Carrillo ocupe un escaño en el Parlamento.
Para la juventud española el Partido Comunista representa la 9posición más dura y larga al franquismo, siendo ésta quizá su mayor fuerza, lo que ha atraído a numerosos intelectuales, artistas, etc., pero sus seguidores más numerosos se encuentran en las todavía ilegales Comisiones Obreras.
Las encuestas de opinión realizadas sobre.el número de simpatizantes dan una cifra de un 10% del voto nacional, aunque representantes del Partido afirman que sólo militantes hay 200.000, cifra que parece ser un poco exagerada.
Comisiones Obreras, cuyos miembros hasta hace poco no estaban afiliados a ningún partido, van ganando cada vez más fuerza, esto hace que los demás partidos de la izquierda tomen una postura defensiva.
La derecha acusa a Carrillo de ser el representante del comunismo soviético. Sin embargo, éste, en la cumbre de partidos comunistas europeos, celebrada el verano pasado, afirmó su total independencia con el partido ruso.
Desde -1968 las relaciones Carrillo-Moscú son algo tirantes, aunque es muy probable que financieramente Moscú apoye hoy día el partido español. Carrillo apoya la entrada de España en el Mercado Común, las bases americanas y la disolución tanto del Pacto de Varsovia como de la NATO. Para Moscú esto es una verdadera herejía. «La posición del eurocomunista no es fácil..., reflexiona Carrillo. »
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