Los pescadores de Almería siguen en huelga

El gobernador civil de Almería, señor García Calvo, ha dado a conocer en el transcurso de una rueda de prensa la dimisión del patrón mayor de la Cofradía de Pescadores, Juan Ramírez Vizcaíno, presentada por carta fechada el primero de mes, y que fue aceptada el lunes pasado.

Ramírez Vizcaíno explicaba en su escrito que «a pesar de haber sido elegido legalmente», tomaba la decisión de dimitir para que finalizase el paro en que permanecen los pescadores almerienses. Sin embargo, y aunque la dimisión del patrón mayor era la primera y más importante de las peticiones de los trabajadores en huelga, el problema entra ahora en una segunda fase no menos conflictiva que la anterior.Los pescadores, en efecto, acogieron la dimisión de Ramírez Vizcaíno como una victoria de su lucha en unidad, pero decidieron al mismo tiempo continuar la huelga hasta que el nuevo patrón mayor saliera elegido por la Asamblea de Cofrades. Al no ser factible esta solución por incompetencia con la actual estructura sindical, los pescadores decidieron aceptar el procedimiento ofrecido por el delegado provincial de Sindicatos, consistente en la celebración con carácter de urgencia de unas elecciones sindicales en las que ambas partes pudieran presentar un candidato y contaran con veinte delegados con derecho al voto. La asamblea eligió por unanimidad como candidato obrero a dichas elecciones al pescador Juan Carmona, cuyo empleo es patrón de altura.

Las elecciones se celebraron finalmente a las doce de la mañana de ayer sin que Juan Carmona consiguiera arrancar un solo voto de los armadores por lo que se produjo un empate a veinte votos entre los dos candidatos. Ante esta, nueva situación, caben ahora dos soluciones: que eI actual secretario de la cofradía pase a desempeñar temporalmente el cargo de patrón mayor o que lo haga una persona ajena al sector pesquero -militar de Marina, concretamente- y que contaría, respectivamente, con el asesoramiento de los presidentes de la UTT de pesca y del sindicato de empresarios. Dado que los pescadores han mostrado ya su disconformidad con el secretario, parece probable que el gobernador civil, haciendo uso de sus atribuciones legales, opte por imponer la segunda de las soluciones apuntadas con lo que el conflicto quedaría circunstancialmente finalizado.