El presidente, instalado en el palacio de la Moncloa

Suárez inició ayer su definitiva instalación en el palacio de la Moncloa, a donde han comenzado a trasvasarse los principales servicios afectos al presidente y que, hasta ahora, funcionaban en Castellana, 3. Entre la actividad desarrollada ayer por el presidente del Gobierno en su nuevo despacho, destacó la entrevista que celebró por la tarde con el vicepresidente primero para Asuntos de la Defensa, teniente general Gutiérrez Mellado y con el ministro de la Gobernación, Rodolfo Martín Villa.

Adolfo Suárez despachó ayer por primera vez en la nueva sede de la Presidencia del Gobierno, sita en el palacio de la Moncloa. El traslado, con su familia, a la nueva residencia, se producirá en fecha inmediata y el jueves próximo ofrecerá en ella la cena de gala en honor del canciller de la República Federal Alemana, señor Helmut Schmidt.El traslado de los servicios afectos al presidente del Gobierno desde Castellana, 3, al palacio de la Moncloa, se viene produciendo incesantemente. Ayer funcionaron ya en las dependencias de la Moncloa la subsecretaría de despacho -su titular, señor Ortiz Sánchez, despachó con el presidente- el Gabinete técnico y los servicios de prensa.

Por otra parte, según Logos se espera que dentro de este mismo mes se trasladen a la zona de la Moncloa el vicepresidente primero para Asuntos de la Defensa, teniente general Gutiérrez Mellado, y el vicepresidente segundo y ministro de la Presidencia, Alfonso Osorio. El edificio destinado para este fin, según la agencia citada, será el Instituto de lnvestigaciones Agronómicas.

Las oficinas de prensa y otros servicios de Presidencia van a instalarse en el Instituto de Semillas Selectas.

La agencia Pyresa estima como muy probable que en el edificio de Castellana, 3, se instale el Gobierno Civil de Madrid.

Respecto a los problemas que pueda ocasionar el traslado de Presidencia al palacio de la Moncloa, especialmente en lo que se refiere a la ocupación permanente de la residencia que ha venido siendo destinada a huéspedes oficiales, fuentes de muy alta procedencia manifestaron a EL PAIS que se encontrará solución para ellos, así como que la utilización de hoteles de lujo como residencia de altas personalidades extranjeras en visita oficial es costumbre habitual en numerosos países.

En los medios políticos se destaca el hecho de que tanto en los grandes temas como en los pequeños, el presidente Suárez continúa llevando la iniciativa. Así lo ha reconocido también el periódico Le Quotidien de París, que ha calificado a la segunda mitad de 1976 como el año Suárez, por haber transformado el rostro que estábamos acostumbrados a ver en los 37 años de la España franquista.