Discrepancias en la Diputación de León

Un miembro de la Diputación leonesa, Joaquín López Contreras, ha presentado la dimisión de todos los cargos que ostentaba en la misma, a la vez que ha solicitado su cese como diputado, a pesar de quedarle, todavía, algunos años de mandato.

Todo ello tuvo lugar en el transcurso de un pleno en el que, entros otros asuntos, se debatía la provisión de varias plazas vacantes en el hospital Princesa Sofía, que regenta la propia Diputación.Por el mismo motivo -disconformidad con la propuesta del tribunal calificador que seleccionó a los candidatos y ante la imposibilidad de defender la postura con el uso de la palabra, que se le negó repetidas veces- abandonó la sala del pleno otro diputado, Luis Manuel Martín Villa. Al mismo tiempo un tercer diputado, Emilio Martínez Torres, intervino en una discusión bastante acalorada refiriéndose a «ciertas irregularidades de forma en la convocatoria del concurso».

Como telón de fondo de las disputas aparece la adjudicación de una de las plazas vacantes -la única a la que se oponen los tres diputados- a un cuñado del actual presidente de la Diputación, Emiliano Sánchez Lomas, reelegido a primeros de año, frente a un candidato presentado por los señores López Contreras, Martínez Torres y Martín Villa, entre otros. Desde aquella fecha los tres cesaron como presidentes de varias comisiones de la Corporación provincial.

Se da la circunstancia de que los dos únicos miembros del tribunal calificador ajenos a la Diputación -el jefe provincial de Sanidad y el representante del Colegio de Médicos- se negaron a firmar las actas. Al parecer, a los defectos de forma de la convocatoria del concurso, se unen otros referidos a incompatibilidades del candidato para ocupar la plaza -ser pariente en segundo grado del presidente de la Diputación- y otros relacionados con la falta de experiencia profesional. La plaza ha quedado oficialmente cubierta, tras votación secreta de los diputados.