El Ayuntamiento de Cádiz pide el rescate del puente por interés nacional

La estimación de los gastos de conservación y explotación del puente José León de Carranza, referidos al pasado año de 1975, según fuentes cercanas a Bética de Autopistas, SA, consultadas por EL PAIS, se puede calcular en un total de 24.266.000 pesetas.Contra estos gastos de conservación y explotación, Bética de Autopistas, SA, percibió en -1975, 38.020.296 pesetas, que representaban el 40 %, según lo estipulado en contrato, de los ingresos totales de peaje recaudado el citado año y que se elevó a 106.629.417 pesetas. A esta cantidad, hay que sumar el 45 % de los beneficios de dicho peaje, una vez deducidas las cargas financieras, y que se elevaron a la cantidad de 10.894.384 pesetas. En total, Bética de Autopistas, SA, percibió el pasado año 49 millones

Con todo ello, en septiembre de 19.75 se decidió aumentar las tarifas de peaje, teniendo como fundamento exclusivo de tal aumento, «el incremento de los costes de explotación». El aumento comenzó a regir a primeros de enero de 1976, suponiendo para las motocicletas un aumento del 100 % y para los turismos de 900 o más cc el 82 %. En cualquier caso, el aumento es siempre superior al 50 % con respecto a las tarifas del año anterior.Si recordamos que los gastos de conservación y explotación, según estimación de fuentes cercanas a Bética de Autopistas, SA, se elevaron a 24.266.000 pesetas en 1975, se podría obtener los gastos de este capítulo para 1976, incrementando esta cantidad en un 20 %, lo que supondría un total de 29 millones de pesetas, cantidad que se restaría dé los cien que Bética va a percibir por el presente año y tendríamos los beneficios de la empresa concesionaria cifrados en 71 millones de pesetas para 1976.

Barrera económica

En función a los datos expuestos en el presente informe y recordando que la motivación que sirvió de palanca al proyecto de construcción del puente sobre la bahía era anular la barrerá goegráfica que separaba a Cádiz, de su posible lugar de expansión, se llega a la conclusión de que la barrera geográfica fue sustituida por una barrera económica que, como es obvio, nada ha resuelto al pueblo de Cádiz, pero que, por el contrario, está produciendo pingües beneficios a las empresas mencionadas que, al no ser gaditanas, ni tan si quiera andaluzas, producen un drenaje de los recursos propios de la región.

Ante este estado de cosas, el contencioso entre el Ayuntamiento y Bética de Autopistas se ha producido. Según informa el propio Ayuntamiento, éste ha solicitado en repetidas ocasiones el rescate y liberació del peaje del puente, incluso en gestión corporativa del Ayuntamiento en pleno ante el propio presidente del Gobierno, en base a lo dispuesto en la cláusula 32 del decreto concesional, que prevé

.este rescate por el Gobierno por motivos de alto interés nacional, habiendo renunciado el Ayuntamiento a la indemnización que pudiera corresponderle por la pérdida de sus posibles beneficios, con lo que la indemnización a percibir por el Ayuntamiento sería únicamente el pago de la deuda pendiente en el momento del rescate e independientemente de la que pudiera corresponder a Bética de Autopistas, SA. El Ayuntamiento de Cádiz informa que el Gobierno no ha contestado a estas peticiones «quizá por las dificultades que entraña el rescate, no solamente en el aspecto económico, de muy elevada cuantía, sino también en el técnico».

Ante el aumento de las tarifas aprobadas en Consejo de Ministros y que entraron en vigor el pasado mes de 'enero, el Ayuntamiento de Cádiz formó una comisión que tenía como objetivo «el estudio de las posibilidades de paliar la inmediata aplicación de las nuevas tarifa», sin perjuicio, en todo caso, «de la idea fundamental de lograr ,el libre paso por el puente». La comisión celebró conversaciones con los directivos de Bética de Autopistas, SA, a fin de atenuar el incremento del peaje. Nada definitivo se consiguió. La empresa concesionaria se remitía, como era lógico, al texto de un documento legal cual era el contrato de concesión. A tal fin, Bética envió una extensa carta al director de Diario de Cádiz, en donde se venía a defender los intereses legítimos de la sociedad. Bien merece subrayarse el siguiente párrafo: «El bien de esa ciudad (Cádiz) y la interior satisfacción de sus habitantes, son conceptos cuya definición y defensa no corresponden a Bética de Autopistas, SA, aunque esté siempre dispuesta, dadas sus vinculaciones con una y otros, a obrar de la manera que, salvados sus legítimos intereses, sea más favorable para aquéllos y por eso acudió en su momento a resolver el grave problema que suponía la conclusión y la puesta en marcha de una obra tan anhelada como lo fuera entonces el puente, y está dispuesta hoy a no ser obstáculo de un posible rescate si, por quien corresponde, se considera viable y conveniente.

En la misma misiva, publicada por el diario local gaditano, Bética de Autopistas, SA tras protestar por el retraso en la aplicación del aumento de las tarifas aprobadas en Consejo de Ministros, afirmaba «(Bética) se limita a explotar el puente habiendo hecho frente a las obligaciones contraídas por el Ayuntamiento.

En Cádiz se piensa que el régimen de peaje se extenderá hasta la fecha prevista: 1999. Después de siete años de estar el puente en servicio, no sé ha producido la más' mínima expansión de la ciudad. Habría que anular la barrera económica que representa el peaje. Un joven ingeniero de caminos que desarrolla su labor en Cádiz ha manifestado a EL PAIS. « Cada vez que los técnicos jóvenes hemos querido plantear el tema del puente en la sede del Colegio, se nos acusa de estar politizados. Nosotros pensamos, en cambio, que está mucho más politizada la costumbre, al uso, de justificar y promocionar como obras de interés social, lo que sólo es un buen negocio para determinados sectores sociales, poniendo para ello la técnica al servicio del capital que representa unos intereses antagónicos a los sociales. »