El presidente libanés pide una "acogida fraternal" a las fuerzas árabes

El presidente de Líbano, Elías de Sarkis, hizo un llamamiento el domingo por radio y televisión a las fuerzas que combaten en el país si para que depongan las armas y ha pedido a todos los libaneses que reciban a las fuerzas pacificadoras de la Liga Arabe «con fraternidad y afecto». Esta ha sido la primera intervención del presidente Sarkis desde que asumió el poder, el pasado 23 de septiembre, y su mensaje que se ha producido cuando los duelos artilleros hacen peligrar el alto el fuego, ha tenido como primer fin tranquilizar a los libaneses, reiterando que dichas fuerzas pacificadoras llegan a Líbano «para restaurar el orden y la paz», y que, una vez finalizada esta misión, permanecerán en el país para trabajar en su reconstrucción.

El presidente Sarkis no especificó el tiempo que permanecerán en territorio libanés ni cuándo llegarán. Manifestó que él desea que su estancia sea breve. Dijo que tomarán posiciones en Beirut y otras zonas del país.

Estas fuerzas estarán compuestas por 20.000 soldados sirios y de seis a siete mil hombres de países árabes como Arabia Saudita, Sudán, Yemen del Norte y del Sur, Libia y los emiratos árabes. Su misión será desarmar y controlar a las facciones combatientes con el fin de asegurar el alto el fuego que permita la reanudación del diálogo y la búsqueda de una solución política del conflicto que se inició en abril del año pasado.

Uno de los mayores problemas con que se van a enfrentar es el de desarmar de todo el armamento pesado a los combatientes. Las fuerzas derechistas se niegan a ello, incluso ponen dificultades para que las tropas de la Liga Arabe se instalen en los territorios controlados por ellas y en estas condiciones las facciones palestinas y progresistas ponen reparos a este desarme.

El presidente libanés pasó por alto esta cuestión en su discurso a la nación, como tampoco entró en la cuestión de la presencia de los palestinos en territorio libanés.

Por su parte las tropas sirias estacionadas en Líbano han iniciado su nueva función como fuerzas pacificadoras de la Liga Arabe, cuyos distintivos llevan bien visibles. Guiados por comandos palestinos han ocupado posiciones en la montaña en territorio izquierdista.

Esta operación se realizó durante la noche del domingo al lunes. Sus posiciones están situadas en la carretera Be¡rut-Damasco, en un lugar donde las fuerzas palestinas y derechistas están tan sólo separadas por doscientos metros.

Uno de los oficiales de estas tropas sirias ha declarado ayer que «ya no somos soldados sirios, somos soldados de la Liga Árabe, y si alguien de cualquier bando levanta la cabeza, se la volaremos».