Un canal privado de televisión no es viable

Una sociedad comercial de la que forman parte Prensa Castellana, SA, editora de Informaciones, y Prensa Española, SA, editora de ABC, Blanco y Negro y otras publicaciones, ha solicitado la explotación de un canal privado de televisión, según anunció ayer el periódico Informaciones.La petición ha sido presentada en el registro general del Ministerio de Información y Turismo por Guillermo Luca de Tena y José Antonio López Huerta como presidentes de las empresas editoras de ABC e Informaciones, respectivamente. Las dos empresas basan su petición en su «calidad de promotoras y accionistas totales de una sociedad en constitución destinada específicamente, bajo el signo de la iniciativa privada a la información».

«Otro de los fundamentos de la petición -añade el vespertino- estriba en la necesidad de ofrecer colaboraciones claras para el desarrollo de la televisión, según la evolución que ha seguido en muchos países del mundo libre, pasando de un régimen de explotación monopolística y exclusiva del Estado a un régimen abierto de concesiones a la empresa privada y propio de los sistemas democráticos, como es el patrocinado por la actual Monarquía española.»

Fuentes allegadas a Prensa Castellana han ratificado a EL PAIS las anteriores afirmaciones y han explicado sobre el aspecto financiero de la operación que hay un estudio económico serio sobre los costes iniciales, los cuales se cifrarían, según las mismas fuentes, en cientos de millones de pesetas, sin que por el momento pueda especificarse cuántos. «Todo depende -han añadido- del montaje que se quiera hacer del sistema de transmisión, cobertura y otras variantes que influirán en los costos junto a las variaciones bruscas de presupuestos. Con la presentación de la petición se pretende en primer lugar que se diga si es posible y de qué forma. Sobre el asunto existe ya un avanzado estudio económico de posibilidades.»

La solicitud de un canal privado de televisión es en parte un hecho insólito, ya que no tiene precedentes oficiales en España. De una manera extraoficial circuló el rumor, en tiempos, de que habían solicitado un canal privado la Cadena SER de Radiodifusión y la Editorial Católica.

Es también un hecho sin precedentes porque no existe sobre este asunto una legislación que lo contemple. Así lo han hecho constar especialistas en derecho de radiodifusión y televisión consultados por EL PAIS. Este tipo de concesiones no está contemplado en la legislación actual, en la que la televisión figura como un servicio público monopolizado en la titularidad y centralizado en la gestión por el Estado.