La huelga de la construcción de Vizcaya, estacionaria
La huelga de la construcción de Vizcaya se mantiene en idénticos términos a los de la semana pasada. Más de 30.000 obreros permanecen en paro desde hace quince días sin que la comisión gestora elegida en asambleas consiga establecer negociaciones con una patronal que se niega a discutir cualquier aumento salarial por encima del convenio aprobado hace tres meses.Según fuentes sindicales, ayer habían cerrado sus puertas por espacio de quince días más de doscientas empresas del sector, mientras que serían más de trescientas, según medios próximos a los huelguistas.
Los patronos insisten en que el lock-out no supone ningún tipo de sanción y que éstas no se producirán si los trabajadores deciden reanudar su actividad. De todas formas, los representantes del sector económico volverán a celebrar hoy una asamblea para estudiar el camino a seguir a la vista de la firme actitud de los trabajadores.
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