La Unión General de Trabajadores, contra las medidas económicas del Gobierno

Son una concesión a la campaña orquestada en la prensa por las grandes empresas las últimas medidas económicas adoptadas por el Gobierno, según una declaración del comité federal de la UGT, que se reunió en Madrid, por primera vez tras el XXX Congreso, este fin de semana. El comité federal es el órgano máximo de este sindicato, después del congreso, siendo su principal misión la de fiscalizar la labor de la comisión ejecutiva. Asistió una delegación de la CISL italiana.

En la reunión, según informaron miembros del comité, presididos por Nicolás Redondo, secretario general de la UGT, se aprobó unánimemente el trabajo desarrollado por la comisión ejecutiva. Analizaron la situación económica, social y política del país, que calificaron de infrecuente, añadiendo que es la más delicada de nuestra historia contemporánea, ya que se sale de cuarenta años de dictadura y se pretende ir a una democracia.El comité estudió la política de alianzas de la UGT. En el terreno político se reafirmaron en su apoyo a Coordinación Democrática, que debe procurar integrar a los grupos moderados y propiciar el difícil tema de las movilizaciones de masas. En cuanto a las alianzas sindicales, se mostraron partidarios de potenciar las plataformas sindicales ya existentes (COS, Alianza Obrera de Valencia y Alicante y Alianza Sindical de Cataluña). Para mejorar las condiciones de los trabajadores y avanzar hacia la democracia, la concreción en alianzas sindicales es un imperativo hoy. Puntualizando reiteradamente, sin embargo, que estas alianzas no son, en ningún caso, embrión de una futura central sindical unitaria ni prefigura unidad orgánica alguna entre sus componentes. Cada organización preserva su independencia táctica y organizativa.

Se ocuparon también de la Organización Sindical Española (OSE), que está en proceso de liquidación. La UGT reitera la necesidad de dimisión de todos los cargos electivos sindicales y el desmantelamiento de la OSE. Deberá reconocerse el derecho al trabajo, concedieron a los funcionarios sindicales que no hayan participado en tareas represivas. Reivindicaron la devolución del patrimonio sindical a los trabajadores y el retorno de los bienes expropiados a la UGT. Expresaron su intención de extender el carné de UGT a toda la organización.

Tomaron el acuerdo de elaborar una alternativa a la situación nacional, que darán a conocer en próximas fechas. Las medidas económicas del Gobierno aumentarán el paro, según la UGT, dejando las manos libres a los empresarios para no readmitir y represaliar, suprimiendo prácticamente la negociación colectiva. Rechazan el proyecto de ley de asociación sindical y llaman a la clase obrera para conseguir la derogación de las medidas y la libertad sindical.