No hay estado de excepción

El Gobierno está dispuesto a emplear todos los medios necesarios para afrontar situaciones como la planteada por el atentado contra el señor Araluce y cuatro miembros de las fuerzas de orden público, pero por el momento no se hará uso de la declaración del estado de excepción. Así vino a comunicarlo a los españoles, al filo de las diez y media de la noche y a través de televisión, el ministro de la Gobernación, Rodolfo Martín Villa, quien leyó los siete puntos de la nota oficial acordada por el Consejo de Ministros y respondió a varias preguntas que le formuló un locutor

La intervención del señor Martín Villa, anunciada para las nueve y media primero y para las diez de la noche después, se produjo al filo de las diez y media de la noche.El señor Martín Villa comenzó su lectura del comunicado gubernamental manifestando el dolor del Gabinete, que es el de todos los españoles -dijo- ante el execrable atentado, así como la máxima condena.

Añadió que el Gobierno actuará con la máxima firmeza para garantizar la convivencia ciudadana, y que dentro de este contexto aplicará la legislación vigente. Entre otras cosas se refirió a que se dispondrá lo necesario en el orden policial e incluso en lo relativo a los controles varios que se realizarán, con colaboración de unidades militares.

Se refirió a la voluntad del Gobierno de impedir la actividad contraria al orden de los grupos subversivos, así como el apoyo y respaldo a las fuerzas de orden público.

Asimismo, el Gabinete Suárez recaba la colaboración de los ciudadanos, y entre otros estamentos, de los medios informativos, para lograr que el proceso de democratización pueda continuar. El Consejo de Ministros estudió en su reunión de ayer incluso la posibilidad de la declaración del estado de excepción y, en todo caso, la aplicación de la ley de Orden Público y las medidas gubernativas que estime pertinentes.

Por último, aseguró que sólo desde la serenidad y la firmeza se podrá afrontar la situación.

En la entrevista a que se sometió el ministro de la Gobernación declaró que la decisión gubernamental había sido adoptada por unanimidad y que, por razones de orden práctico y político, no se había decidido por el momento declarar el estado de excepción.

Añadió que las instrucciones cursadas a los gobiernos civiles y a las autoridades policiales, así como el empleo de la legislación antiterrorismo que, entre otras cosas, otorgará mayores facilidades para las detenciones y registros, se estiman suficientes, en principio, para afrontar la situación.

El señor Martín Villa afirmó que el Gobierno no quiere caer y no caerá en la trampa que se le quiere tender, en un momento -añadió- en que el país, recobrado económicamente por el progreso de estos cuarenta años, económico y social, y deseoso de abrirse a mayores libertades, es necesario que lo haga desde un orden.

Señaló que las fuerzas de orden público son objeto de campañas como las que los pasados días 27 de septiembre y 1 de octubre constituyeron un fracaso. Agregó que el Gobierno intentará por todos los medios la detención de los culpables de este nuevo crimen.

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