La huelga continuó ayer en Barcelona por despiste

En el día de ayer se celebraron en la mayoría de los centros postales de Barcelona asambleas de funcionarios del Cuerpo de Correos con el fin de decidir la actitud a adoptar después de que en Madrid se hubiera preferido poner fin al paro.En prácticamente todas las asambleas se acordó volver al trabajo pero a ritmo lento. Asimismo, se convino en organizar desde ahora un sindicato u otro organismo de carácter parecido que tenga por finalidad coordinar la lucha de los funcionarios de Correos a nivel de toda España.

Durante el día de ayer solamente se paró en la estafeta de Gracia. Ello fue debido, según manifestaron fuentes laborales a un «despiste», y hoy por la mañana reemprenderán el trabajo en las mismas condiciones que en las demás estafetas.

Precisaron que durante este conflicto se han producido cinco despidos, de los cuales cuatro afectan a representantes de los trabajadores. Todos ellos eran funcionarios interinos.

Asimismo, añaden las mismas fuentes se han abierto dos expedientes a dos carteros fijos, cuyo despido se teme, y en la tarde de ayer fue impedida la incorporación al trabajo de unos treinta y cinco auxiliares interinos de la Sala de Dirección, en la central.

Por su parte, el Sindicato de Comunicaciones y Transporte de la Confederación Nacional del Trabajo ha emitido un comunicado en el cual rectifica una información según la cual ésta organización influenciaba a la «Coordinadora Local de Correos», organismo autodisuelto recientemente (ver EL PAIS de 30 de septiembre).

El mencionado sindicato afirma que «no hay ningún militante afiliado a la confederación en la cartería central de Barcelona, por lo tanto ninguno de los componentes de la comisión local de Barcelona estaba afiliado a la CNT».

A continuación agrega: «Detrás de estas noticias hay una clara intención de presentar a la CNT como unas siglas más, como si fuera un partido político, y con unos interés como tal.»

El comunicado termina diciendo que «la CNT hará todo lo posible por esclarecer ante los trabajadores los intereses que hay en juego en Correos y estima que tales intereses son ajenos a los trabajadores».

Representantes de los carteros de Lérida informaron ayer a EL PAIS de la apertura de un expediente, previo al despido u otra sanción, contra Manuel Portas, delegado de los funcionarios de Correos a nivel local.

La misma fuente añadió que en el día de hoy intentarán celebrar una asamblea y llevar a cabo paros parciales en solidaridad con el cartero expedientado.

El pasado miércoles, el bar Sirene, propiedad de Manuel Portas, fue objeto de un atentado con tres cocteles molotov. Los carteros atribuyen este acto a elementos de extrema derecha.