"No quiero saber nada de nada"

«Por ahora no quiero saber nada de nada. Estoy dedicado a mis libros y todo lo demás no me interesa. Quizá para octubre decida estudiar esta cuestión» ha declarado a EL PAIS el profesor García Calvo, exiliado en París desde hace siete años, sobre su reincorporación al cuerpo de catedráticos españoles junto con los profesores Tierno Galván y López Aranguren, decidida en una orden ministerial que apareció ayer en el Boletín Oficial del Estado (ver EL PAIS de 7-8-76). El profesor Tierno se ha mostrado muy satisfecho de la medida. Con el profesor Aranguren EL PAIS no ha podido establecer comunicación.

La orden ministerial a que hacemos referencia deja sin efecto el acuerdo del Consejo de Ministros del 13 de agosto de 1965 y dota una cátedra de Filología Latina en la Facultad de Filología de la Universidad Complutense de Madrid y a la que se adscribe a Agustín García Calvo en dichas enseñanzas. Por otra parte Enrique Tierno queda adscrito a la cátedra de Derecho Político en la Facultad de Derecho en la Universidad de Salamanca y José Luis López Aranguren a la de Etica y Sociología de la Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación de la Universidad Complutense de Madrid.«Estoy satisfecho, sobre todo porque ha triunfado la opinión universitaria. Nuestro reingreso lo han pedido tanto el claustro como los alumnos y estas clases de actuaciones acaban siempre triunfando» ha declarado a EL PAIS el profesor Tierno, catedrático de Derecho Político y presidente del Partido Socialista Popular sobre su reincorporación al cuerpo de catedráticos. «Es normal que esté muy satisfecho -ha añadido- puesto que la universidad es mi vocación, pero esta satisfacción personal no oscurece la otra cara, la de las cosas que todavía quedan por conseguir. Entre las cosas personales que he de resolver próximamente cuenta el obstáculo de tener que reincorporarme a la Universidad de Salamanca, no por ser Salamanca, sino porque Salamanca no tiene densidad suficiente de alumnos como para albergar a dos cátedras de Derecho Político. Confío en que una vez que hable con el decano de aquella ciudad pueda venir a Madrid y de paso resolvía la dificultad que supone impartir clase en un lugar alejado del de residencia».

Para el profesor Tierno, que fue apartado de su cátedra junto con los profesores García Calvo y Aranguren en 1965 a raíz de una asamblea y una marcha en la que participaron los tres profesores por el campus de la Universidad Complutense, «no habrá una gran diferencia entre la última clase que dio entonces y la primera que impartirá tras su reincorporación. Las únicas diferencias positivas serán las que emanen de un panorama político más enriquecido. Voy a hablar -ha dicho- con la misma libertad que hablaba entonces, sólo que ahora supongo que no me castigarán. Otra diferencia que se irá viendo cada vez más clara será enfoque que de a mi asignatura de Derecho Político. Antes explicaba el Derecho Constitucional Español de un modo negativo y el Derecho Político como la antítesis del estado de Derecho. Espero que, pasado algún tiempo, pueda explicarlo positivamente como derecho normal».

El profesor Tierno que es presidente del partido político Partido Socialista Popular (PSP), piensa seguir en la vida política activa ya que «mientras se está en la oposición es perfectamente lícito mantenerse en una cátedra. Sólo abandonaría la cátedra en la hipótesis de figurar en el poder y tener un cargo.

En la hora de su reincorporación a su cátedra don Enrique Tierno Galván ve la universidad española como «una universidad en transición, que está recogiendo, tarde el tránsito del país del semidesarrollo al desarrollo. La universidad española está siendo testimonio de lo que es pasar de una situación a otra cuando no se es objeto prioritario de la atención del Estado. De cualquier manera, es una universidad perpleja, en donde se produce una literatura abundante pero de poca altura y una degradación de las humanidades Sin comprender, por otra parte, la ciencia».