Plan de Acondicionamiento de Barriadas
Me refiero al llamado Plan de Urgencia para Acondicionamiento de Barriadas recientemente aprobado por el Ayuntamiento de Madrid, con un presupuesto de 5.000 millones de pesetas.Nadie negará que 5.000 millones es un montón de dinero. Está fuera de duda que los vamos a pagar-entre todos los madrileños; posiblemente entre todos los españoles.
Como madrileño y, por tanto, pagano, me vienen varias preguntas a la cabeza: ¿Quién ha. dado permiso a esos señores para disponer de ese dinero sin consultar con sus propietarios? ¿Qué se supone que van a hacer con él concretamente? ¿Qué criterios se van a establecer? ¿Por qué sistema se van a adjudicar las contratas? ¿Quién y cómo va a fiscalizar su correcta realización?...
Preguntas, dudas y desconfianza. Todo con una fácil solución: que sean los propios vecinos los que administren su dinero a través de unos representantes democráticamente elegidos, que los criterios, prioridades, etc. sean establecidos por los representantes democráticos de los vecinos, que los representantes controlen la adjudicación de obras y la realización de éstas. Vamos, por si no me he explicado bien, que necesitamos un Ayuntamiento democrático. Mientras tanto, el éxito de los planes pensados y ejecutados por personas puestas a dedo puede considerarse un peligro.