El acuerdo adoptado es ilegal

El acuerdo adoptado por el Ayuntamiento de Madrid con respecto a la conocida como Casa de Vacas es ilegal, porque conculca la normativa vigente en el régimen de concesiones municipales a particulares, de acuerdo con la legislación que. actualmente rige», ha declarado a EL PAIS el concejal Eduardo González-Velayos, en relación con la prórroga de la concesión de usufructo de la Casa de Vacas, instalada en el Retiro, en la que funciona habitualmente la sala de fiestas conocida por el nombre de Paviffón, a quien hemos logrado localizar en su descanso veraniego en Avila. «Y pienso que ese acuerdo es ¡legal -añade el, señor González-Velayos- porque es una prórroga encubierta, en forma de compensación económica. Por otra parte, la Ley no permite a las Corporaciones la prórroga de una concesión antes de expirar la antenor y, pomo ustedes mismos dicen -ver EL PAIS del día 1 de agosto-, la actual llega hasta el 15 de enero de 198 1. »El señor González-Velayos fue el que defendió, durante las varias reuniones que la comisión conjunta de Hacienda, Rentas y Patrimonio y Saneamiento y Medio Ambiente, ocho en total, celebró en el seno del Ayuntamiento, la necesidad de que al término de la presente concesión se convocara un concurso, «que . apetecerían muchas empresas dedicadas a los grandes espectáculos», y que redundaría en un beneficio para el Ayuntamiento y, en definitiva, para el pueblo de Madrid, por lo que se opusórepetidamente a que fuera aceptado un proyecto que, en realidad, no era tal.

«Por supuesto, aparte de que tal concesión resulta injusta y desproporcionada para la Hacienda municipal por las razones que ya hemos expuesto, en las reuniones que mantuvimos se acordó que fuera presentado un proyecto concreto de lo que se pretende hacer en Palvillón, y lo cierto es que tal proyecto no existe, puesto que lo que se pedía era que fuera suficientemente definido de las obras que se iban a realizar y que el Ayuntamiento iba a exigir que se realizaran por parte de¡ concesionario. Sin embargo, ese proyecto no existe y en el expediente no aparece, a menos que se entienda como tal los dos folios en los que, a grosso modo, se valoran las obras' a los que se acompaña un croquis que nada define sobre el volumen y la cuantía de las mismas. »

Recurso

A la pregunta de si seria posible recurrir el acuerdo del Pleno del Ayuntamiento madrileño, el señor González-Velayos responde: «Sería éste el primer caso que se diera después de la guerra civil. Sin embargo, si los intereses privados, como presuponía, han prevalecido de forma importante en contra de lo que yo entiendo como interés para Madrid y como legalidad, recurriré, pero eso no lo haré antes de tener en mi poder la documentación que he pedido y la haya estudiado convenientemente ».«No obstante -añade-, tengo la esperanza de que el alcalde haga o facilite la acción que sea posible para remediar lo que -algunos concejales más y yo mismo entendemos como desafortunadísimo error del Ayuntamiento.»

La posibilidad, entonces, de intereses particulares dentro del mismo Ayuntamiento, parece saltar al primer plano. Al respecto, el concejal afirma:

«Aplicando la lógica, el tema no lo entiendo. Ni mucho menos cómo se ha desarrollado asi, con tanta facilidad, a pesar de que se ha ido rechazando sucesivamente en el seno de la comisión y ha vuelto otras veces. Sobre las especulaciones que se puedan hacer, en base a que muchas bodas de hijos de concejales se han celebrado en Pavillón, no puedo concederles excesiva credibilidad. También otras bodas se han celebrado en otros locales. »