Condenan el uso de la psicología, para manipular a las personas
La ciencia no quiere servir a fines perversos. La psicología se siente culpable por haber participado o haber sido utilizada por los políticos que quieren imponer su punto de vista al adversario por la sencilla vía de considerarle loco. El Congreso de Psicólogos reunidos en París se ha pronunciado contra el empleo de la psicología como arma de tortura o como instrumento de sometimiento.
El XXI Congreso Internacional de Psicología reunió en París a unos 3.200 profesionales de la Psicología quienes abordaron entre otros temas, la grave cuestión de su deontología profesional. «Los problemas de la deontología psicológica se plantean en un momento en el que la psicología es política y moralmente puesta en causa, como todas las ciencias, por sus repercusiones humanas».Así se expresa Robert Pagés, del Laboratorio de Psicología Social de París, al presentar el texto sobre los problemas éticos y humanos de los psicólogos. Se insertaba el documento en un contexto de trabajo en el que salieron malparados los políticos que emplean, o intentan hacerlo, la ciencia como arma de dominio.
Ante «la debilidad de las normas de conducta y de sus interrelaciones»... «en muchas partes, son puestos en internados los disidentes políticos». «Se condena la utilización de los conceptos de normal y patológico con fines represivos en cualquier país».
Más delicado fue el momento de concretar en qué países se realizaban tales prácticas. Ana Vázquez, profesora chilena de Psicología, exiliada en París desde la caída del Gobierno del presidente Allende, que mostró a través del estudio de 248 casos, cómo poco a poco, la tortura física, salvaje o programada, ha dejado el sitio a métodos de tortura psicológica más refinados. Dio como datos el que el 80 por 100 de los psicólogos chilenos han muerto, desaparecido, están en prisión o exiliados. Ante la colaboración del tanto por 100 restante con el «aparato represivo de la Junta la señora Vázquez pidió a la comisión internacional de psicólogos pronunciarse sobre los hechos relatados. Se acordó llevar a cabo una investigación sobre lo sucedido en Chile en esta materia.
Se adoptó también un texto, no sin ciertos incidentes, como el abandono del presidente del Simposio Deontológico, señor Holtzman. El texto aprobado se dirige a la UIPS (Unión Internacional de Psicología Científica) «condenando formalmente el uso de prácticas psicológicas y psquiátricas con fines de represión social y política donde quiera que se den».
Se pide también «la constitución inmediata de comisiones de investigación sobre los abusos cometidos por ciertos psicólogos y psiquiatras para reprimir los delitos de opinión, especialmente por medio de internamiento de disidentes en la Unión Soviética y en Brasil, y el empleo de técnicas de privación sensorial en la República Federal Alemana».
Homenaje a Piaget
También llevaron a cabo los participantes en el Congreso de París, un emocionado homenaje a la figura de Jean Piaget, presente en el Congreso, que precisamente cumple ahora ochenta años.Tras largos años de falta de reconocimiento a la obra del genio suizo, profundo conocedor de la génesis del conocimiento humano y de las técnicas de aprendizaje, sólo desde hace quince años su figura ha empezado a ser reconocida. «Usted es el más grande psicólogo del siglo XX», le dijo con emoción Paul Freisse, presidente del congreso, ante el aplauso de los psicólogos en el último día de su congreso.
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