Se investigan las posibles conductas criminales de los agentes del FBI

Un número creciente de miembros del FBI, dos ayudantes del director Clarence M. Kelley entre ellos, están sometidos a investigación por el Departamento de Justicia para determinar la existencia de posibles conductas criminales que incluyen irregularidades financieras y robos realizados hace cinco años. Se cree que tales conductas no dejaron todavía de realizarse.Un funcionario federal encargado de la investigación manifestó que la lista de los posibles implicados «ocuparía mucho espacio». También se afirma que estas investigaciones perjudican la eficacla de las operaciones del FBI y que miembros de la organización ofrecieron facilitar las investigaciones, siempre y cuando éstas se detuviesen, antes de producir un escándalo judicial.

Además, los agentes y los altos cargos del FBI buscan abogados. Las investigaciones sobre los robos comenzaron en el pasado mes de marzo, cuando se supo que determinados hogares pertenecientes a personas encuadradas en movimientos progresistas diversos, fueron ilegalmente registrados en ausencia de sus propietarios.

Las alegaciones contra miembros de la organización también incluyen grabaciones telefónicas, sustracción de documentos, agresiones sin que mediase provocación y, por lo menos, un secuestro. En este sentido, una fuente del FBI que desea permanecer anónima afirmó que «cientos» de violaciones de la propiedad fueron cometidos en los últimos cinco años, tanto en Nueva York como en otras partes, y que la mala costumbre continuó hasta el pasado mes de abril.

En cualquier caso, no está claro que los actos ilegales cesasen después de que Edgard Hoover, que fue jefe del FBI, diese una orden escrita en tal sentido en el año 1966. Al parecer, aquéllos se reanudaron después de su muerte, hasta hace pocos meses.