Signos de normalización y nuevos brotes de violencia en el Líbano

El aeropuerto de Beirut ayer fue abierto al tráfico después de permanecer cerrado durante dieciséis días. La reapertura fue precedida del estacionamiento de fuerzas pacificadoras de Libia y de Siria.Este aeropuerto es el único contacto aéreo del país con el mundo exterior.El primer avión que aterrizará en Beirut será uno dé una compañía árabe que llegará procedente de Atenas. El martes pasado otro aparato de la Cruz Roja, llevando a bordo alimentos y medicinas, consiguió tomar tierra. Procedía de Larhaca (Chipre).Pese a este signo de normalización y a la presencia de los contingentes de pacificación de la Liga Arabe, elementos de derechas y de izquierdas se enfrentaron ayer en feroces combates. Una enorme columna de humo se elevaba sobre las barriadas del sureste de la capital después de la violentísima lucha librada en las inmediaciones del campo de refugiados de Tel Al Zaatar. Una emisora de radio perteneciente a las facciones izquierdistas dijo que las fuerzas de derechas trataron de ocupar una posición al amanecer, pero que fueron rechazadas. Existe el temor de que se pueda producir otro ataque que dé lugar a combates generalizados en toda la zona, en las proximidades del aeropuerto.

Los soldados sirios acantonados junto al aeropuerto se retiraron cuando comenzaron los combates por el campo de refugiados. Destacamentos sirios regresaron ayer a su patria. Una declaración del Gobierno sirio dice que el pueblo de Damasco saludó «el regreso de los héroes y expresó su gratitud del pueblo árabe por su humanitaria labor y el papel desempeñado en el Líbano, para ayudar a poner fin a una lucha entre hermanos». Sudán autorizó el nombramiento del general MagidJalil como jefe de las fuerzas árabes pacificadoras en el Líbano, se anunció ayer oficialmente en Jartum. Jallud, primer ministro libio, realizó nuevos viajes entré Beirut y Damasco, para que se respete la tregua que empezó a regir el pasado lunes. Ayer se reunió en El Cairo el Conseio de la Liga Arabe, en sesión de emergencia, para estudiar la cuestión libanesa. La reurlón se celebró a nivel de embajadícres, aunque la Organización para la Liberación de Palestina solicitó se convocase a los ministros de Asuntos Exteriores.