"El día en que haya elecciones el Gobierno republicano regresará a España"
En la madrugada del 29 de marzo de 1939 las calles de Alicante quedaron vacías. En un mercante, que había descargado lentejas, partían hacia Marsella las últimas cincuenta personas de la operación exilio organizada por el diputado de Izquierda Republicana Pérez Torreblanca. En este viaje salió de España Francisco Giral, hijo de José Giral Pereira, hombre de confianza de Azaña y sucesivamente ministro de Marina en el Gobierno provisional, y con el Frente Popular, presidente del Gobierno durante dos meses y que posteriormente ostentó la jefatura del Gobierno republicano en el exilio. Francisco Giral, doctor en Química y Farmacia por la Universidad de Madrid, y en la actualidad investigador de Química Farmacéutica en la Universidad de México ha regresado hace poco más de un mes a España. En una breve charla con EL PAIS ha hablado de la razón sentimental, cultural y política de este viaje.-Su regreso, treinta y siete años después, suponemos que tiene un carácter eminentemente político. ¿Viene a resucitar el Partido Republicano y ponerse al frente de él?
-No me interesa resolver mi caso personal. He trabajado en la industria farmacéutica durante muchos años y ahora me dedico a la investigación en la Universidad de México. He recorrido toda Hispanoamérica, y si vuelvo es con la intención de significar el gran futuro que tiene España por delante aprovechando las relaciones fraternales con los pueblos de América. Es necesario organizar un puente aéreo cultural permanente y de intensidad creciente con la América española y portuguesa.
-Durante cuatro décadas miles de españoles han vivido alejados del país. A pesar de las nuevas circunstancias políticas no es fácil, sin, embargo, el regreso de la mayoría, ¿de qué manera piensa usted que van a mantener el contacto con España?
-Lo más positivo de esta diáspora de españoles, la mayor parte intelectuales, es que nos va a servir a partir de ahora para intensificar las relaciones hacia el futuro. Numerosos profesionales, españoles o hijos de españoles, tanto en México como en otros países hispanoamericanos, desde comienzos de 1976 han solicitado de las autoridades españolas información sobre facilidades para volver. Soy portador de las actitudes de un número muy elevado que, aun sin regresar, está dispuesto al enlace cultural
-Permítame que le considere el representante oficioso de los republicanos en el exilio. ¿Cómo y cuándo se va a resolver de manera definitiva el enfrentamiento entre españoles que, si bien de manera latente, aún se mantiene?
-La situación actual en España es distinta. El día que haya unas elecciones abiertas, el Gobierno republicano regresará a España y entregará la legitimidad. Entonces se volverá a incorporar a la historia de España y se cerrará definitivamente un ciclo histórico. Creo que no es nada insignificante esta etapa que hemos vivido y debe servimos de arranque para etapas posteriores. Nuestro espíritu es un absoluto deseo de convivencia y de restauración de una auténtica conciencia nacional con respeto mutuo para todos. El Partido Republicano, como tal, está esperando que se aprueben los proyectos de reforma. De ahí depende que demos un remate final a esto que llaman el término del exilio.-¿Es usted optimista en el sentido de que, en su momento, habrá un amplio Partido Republicano en España? ¿Qué dificultades encuentran?
-Los partidos republicanos nunca fueron de grandes masas, sino más bien de selección. No vamos a aspirar a copar ninguna elección si no es en una coalición con otros partidos. Lo que sí podemos ofrecer son fórmulas que están ahí. Ahora se habla de estatutos cuando todavía conservan su frescura los estatutos aprobados por la República. En cuanto a las dificultades que, efectivamente, tenemos están en contradicción con lo que exhiben en el extranjero algunos miembros del Gobierno. Los republicanos pensamos que somos la verdadera oposición al sistema; es la oposición más clara y la ofrecemos tranquila y mesuradamente. Sería triste volver a los partidos fulanistas en lugar de los partidos de ideas.
-En este mes pasado en España ha mantenido contactos con personas de la oposición. ¿Por parte de usted o de miembros del Gobierno ha habido alguna relación?
-Pues sí, hemos mantenido contactos con partidos, sobre todo con el Partido Socialista Obrero (PSOE) que ha sido una continuidad porque la vinculación ha sido desde siempre y con este partido podemos encontrar la fórmula mágica y convertirnos juntos en auténtica plataforma. Por supuesto que seguiré manteniendo contacto con todos los partidos. Con el actual Gobierno todavía no ha habido ninguna conversación. Ciertamente yo no lo he intentado, pienso que el momento que, vive España es muy importante y no se puede apresurar ninguna solución. Son muchos aspectos lo que hay que matizar. A la primera relación de los republicanos con la actual situación política oficial me gustará darle, en su día, la dignidad histórica que merece.
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