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Grave incidencia del tabaco sobre la salud humana

El tabaco continúa siendo problema a nivel nacional e internacional. El prestigioso diario Neue Zuriche Zeitung publicó recientemente un trabajo documentado sobre la incidencia del hábito de fumar en enfermedades comunes, desde el cáncer a las úlceras, afectando incluso al embarazo. EL PAIS publica hoy la primera parte de este informe.

Está demostrado que el fumar puede originar cáncer de pulmón, de labios, bucal, de laringe, de esófago, de vesícula y de páncreas. Igualmente el fumar es un factor de riesgo en enfermedades del corazón (angina de pecho, infarto) del aparato respiratorio así como de las úlceras de estómago y del intestino.Los únicos que ponen en duda estos diagnósticos son las industrias del tabaco que afirman que todas estas enfermedades se deben a factores genéticos u otras circunstancias.

El Terry-Report, publicado en el año 1964 por las autoridades norteamericanas de Sanidad, fue el resultado de una recopilación de siete estudios sobre el hábito de fumar en los hombres.

Se valoraron un total de 1.123.000 casos clínicos, de ellos 37.391 muertes, de donde se dedujeron los siguientes resultados:

Riesgos relativos de muerte en fumadores: Riesgo de muerte en no fumador igual a 1; cáncer de pulmón, 10,8; bronquitis y enfisemas, 6,1; cáncer de laringe, 5,4; bucal, 4,1; de esófago, 3,4; úlceras de estómago e intestinales, 2,8; enfermedades de la circulación sanguínea, 2,6; cirrosis hepática, 2,2; enfermedades coronarías, 1,7; otras enfermedades, 1,7.

La muerte originada por infarto de miocardio se origina por la obstrucción de los vasos sanguíneos del corazón, o que provoca transtornos circulatorios (angina de pecho, infarto). Las estadísticas demuestran que esta enfermedad es mucho más frecuente en los personas que fuman, no dándose apenas en los no fumadores menores de 50 años.

Bajo la influencia de la nicotina, los trombocitos tienden a sedimentarse en las paredes de las arterias. Esto puede originar, además del infarto de miocardio, la dolorosa obstrucción de la arteria principal de la pierna dificultando la irrigación sanguínea.

Mientras que en el siglo XIX el cáncer de pulmón era muy raro, hoy, en día es uno de los casos de cáncer más frecuentes. Hasta los años cuarenta esta enfermedad se daba casi exclusivamente en los hombres a partir de esa fecha empezó a aumentar entre las mujeres. Uno de los factores que contribuyeron a este incremento fue el consumo de tabaco, de tal manera que el riesgo de contraer cáncer de pulmón es un 10,8 más elevado para los hombres que fuman y un 2,2 para las mujeres.

Por otro lado, la contaminación atmosférica actúa sinérgicamente, de manera que los fumadores de las ciudades están sometidos a un riesgo mayor. Este efecto sinérgico consiste en que el humo del tabaco aumenta la efectividad de numerosas sustancias ambientales que son cancerígenas. El alcohol también actúa como elemento activador de estas propiedades del tabaco.

Está demostrado que el humo de tabaco contiene más de 20 tipos de sustancias cancerígenas las cuales son responsables de la mayoría de los cánceres de laringe, esófago y cavidad bucal (labios, lengúa, paladar, encía y mucosa bucal) así como los cánceres de la cavidad nasal.

El cáncer de laringe, que está en el sexto lugar entre los carcinomas más frecuentes que se dan en el hombre, hace su aparición casi exclusivamente en personas que fuman.

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