_
_
_
_

Qué bonito es el temple

La corrida de Victorino Martín tuvo al público en tensión toda la tarde. Los toros primero, segundo y tercero. mansearon y echaron las manos por delante; los tres últimos se comportaron con nobleza y bravura, pero sobre todo tuvieron un temple para los de a pie y los de a caballo poco común. Cuando se arrancaban al caballo con esa cadencia, los tendidos vibraban de emoción. Estos toros son difíciles de torear; el público está tan pendiente de ellos; que el más mínimo error de los toreros se agranda ante sus ojos.A pesar de todo se hicieron cosas buenas, muy buenas, teniendo en cuenta que las caras de alguno de los toros eran «de las de antes» y el toreo que se estaba haciendo «era de ahora».

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_