La presión militar siria contribuye a pacificar el Líbano
Mientras parecen remitir los combates en el Líbano, el enviado especial de los Estados Unidos, L. Dean Brown, dio por terminada su misión en el país y expresó un cierto optimismo respecto a una solución pacífica del coflicto. Efectivamente, se han iniciado gestiones para llegar a una reconciliación entre Elías Sarkis, presidente electo, y el líder izquierdista Kámal Jumblatt, al tiempo que se denuncia la entrada en el país de nuevos contingentes de tropas pro sirias, que presionan sobre las facciones opuestas para que lleguen a un acuerdo.
El nuevo presidente del Líbano, Elías Sarkis, se entrevistará con el presidente Soleiman Frangieh para tratar de la transmisión de poderes en las próximas horas. Todo parece indicar que Frangieh dimitirá oficialmente a principios de Ia próxima semana, aunque su mandato oficial no expira hasta septiembre.Por otra parte, el líder socialista Jumblatt habló el lunes por teléfono con Sarkis, y le felicitó por su elección como nuevo presidente de la República. Jumblatt anunció que la coalición izquierdista que dirige decidiría cual va a ser posición respecto al nuevo presidente en una reunión que se celebraría en la madrugada de hoy. Asimismo, y tras una entrevista con el líder palestino Yasser Arafat, Jumblatt anunció que se había logrado una tregua para que cesaran los combates en las montañas cercanas a Beirut y que «era probable que se entrevistase con Sarkis para negociar con él alg unas condiciones que impone el partido».
El enviado de Ios Estados Unidos, L. Dean-Brown, dio ayer por terminada su misión en el Líbano y expuso, en una conferencia de prensa celebrada poco antes de su partida, un cierto optimismo y la esperanza de que el país se recuperará. Brown, que llegó al Líbano a finales de marzo, cruzó varias veces la línea de fuego entre una y otra facción, intentando una avenencia entre las partes en litigio. Brown elogió la labor desarrollada por Siria, y dijo que Norteamérica, si se le pedía, contribuiría a la reconstrucción del Líbano.
Fuentes izquierdistas anunciaron ayer que tropas sirias estaban «reinvadiendo» el Líbano. Las citadas fuentes cifraron en 4.000 el número de soldados de obediencia siria que han cruzado la frontera en las pasadas cuarenta y ocho horas, con lo que el contingente pro sirio se acerca ya a los 20.000 hombres, encuadrados bien en la organización palestina de obediencia siria "AlSaika", o bien en el propio ejército sirio.
La renovada presencia militar siria en el Líbano se ha definido como de «balsámico efecto» sobre la crisis, en cuanto que invita a los beligerantes a una cierta moderación como prueba la hasta ahora respetada tregua en la montaña, y podría llevar a Jumblatt y a Sarkis a sentarse en la mesa de negociaciones, con el beneplácito de la mayor parte de los árabes de los Estados Unidos.
