Desbloqueo de las relaciones entre España y Marruecos

Las relaciones de España y Marruecos han entrado en una fase de desbloqueo, dijo el ministro español de Asuntos Exteriores, José María de Areilza, durante el brindis ofrecido ayer a su colega del marroquí, Ahmed Laraki, después del almuerzo en la residencia del embajador español en Rabat, horas antes de que el ministro español emprendiera el regreso a Madrid.

No se ha puesto fecha alguna a la esperada visita del rey de Marruecos a España. A su llegada a Rabat, el mediodía del miércoles, el señor Areilza se había mostrado confiado en que su visita sería el heraldo de otras más importantes.Areilza fue recibido ayer por la mañana por Hassan II en audiencia especial. Ambos departieron en el despacho del monarca y más 'tarde dieron un paseo en privado por un patio porticado del palacio real, que duró alrededor de una hora Areilza es portador de un mensaje de Hassan II al Rey don Juan Carlos.

La visita del señor Areilza es la primera de un ministro de Exteriores del primer Gobierno de la Monarquía española a Marruecos. La diplomacia española espera que, una vez superadas las secuelas del colonialismo, que han dificultado las relaciones entre los dos países durante casi dos decenios, puedan afrontarse éstas con voluntad de futuro.

No obstante, fuentes bien informadas creen que Marruecos no ve que las secuelas del colonialismo se hayan extinguido completamente ya que España no reconoce la declaración unilateral marroquí de anexión del Sahara, proclamada por la Yemaa sahariana el pasado 26 de febrero. España sostiene que el reconocimiento de dicha adhesión corresponde sólo a las Naciones Unidas. En Marruecos se piensa que un reconocimiento español de la adhesión ayudaría decisivamente a Rabat a obtener las bendiciones de la ONU.

Las conversaciones de Areilza con Hassan II constituyeron un tour d´horizon al decir de una fuente oficiosa española, en el que se con templaron los problemas políticos que afectan a la zona del Mediterráneo occidental, del Atlántico y del estrecho de Gibraltar. Aunque se cree que el tema del Sahara no fue discutido entre los dos, se estima que se abordaron los problemas de seguridad y de política internacionales en esta zona donde se encuentran territorios y posesiones de España, Marruecos y Gran Bretaña. El mar de Alborán es un mar muy complicado, al decir de un observador quien añadió que en una época de aviación supersónica, cohetes intercontinentales y guerra nuclear no se puede atribuir la misma valoración a unos territorios históricamente españoles y habitados por una población importante, que a unos peñones de interés militar disminuido.

Un segundo grupo comprendería las contrapartidas económicas y políticas, del Acuerdo de Madrid, en cuyo terreno se llegó hace dos semanas a una solución para las inversiones que España realizó en los fosfatos del Sahara. También se habría encontrado salida al problema de la pesca española en aguas que Marruecos reclama como de su soberanía económica. Los detalles prácticos para hacer viable el vigente acuerdo pesquero hispano-marroquí están muy avanzados y puede ser ultimado en junio próximo. No obstante, el problema de la jurisdicción marroquí sobre -70 millas, proclamada por Marruecos en 1973-, necesita el estudio de una comisión mixta que se formará inmediatamente y que requerirá una atención prolongada.

La visita del señor Areilza, que ayer por la tarde regresó a Madrid, ha tenido lugar en un momento en que, según los observadores España tiene alta prioridad para Marruecos. La visita ha producido gran interés en el mundo diplomático de Rabat, manifestado en la presencia de los embajadores de Estados Unidos, la URSS países de la Comunidad Económica Europea y países árabes, en la cena ofrecida por el señor Laraki al señor Areilza el pasado miércoles.

Areilza a su llegada a Barajas

«No se ha fijado fecha concreta para la visita del rey Hassan, a Madrid. El monarca marroquí será invitado, en su momento, a visitar España» puntualizó el ministro de Asuntos Exteriores, José María de Areilza, a su llegada al aeropuerto de Madrid-Barajas, procedente de Rabat, donde ha permanecido en visita oficial por espacio de día y medio.El señor Areilza, que llegó con aspecto cansado, recibió a los periodistas unos minutos, a los que resumió su visita como un viaje grato y sustancioso en el que tuvo ocasión de hablar con su colega señor Laraki y con el rey Hassan II.