Así llegan las selecciones a las semifinales del Mundial de Qatar 2022

Este martes arrancan las semifinales del Mundial de Qatar 2022 con cuatro selecciones que representan estilos muy diferentes. Argentina es el equipo que más domina la posesión, aunque no lo traduce tanto en ocasiones como Francia, el conjunto que más remates hace por partido (15,6). En el otro extremo, Croacia y Marruecos destacan por su seguridad atrás. Los marroquíes son la selección que más balones recupera (22,8 por partido) y el portero croata, Dominik Livakovic, es el que más paradas ha hecho en el torneo (19, sin contar las tandas de penaltis).

Según las estadísticas, Argentina y Francia son favoritas en sus eliminatorias ante Croacia y Marruecos, respectivamente. La Albiceleste es la selección en mejor forma según el ranking ELO. Esta estadística clasifica a los equipos según diversos datos y les otorga una puntuación que simboliza su potencial. Sin embargo, su distancia con Croacia no es mayor que la que había en la ronda anterior entre los ajedrezados y Brasil, y fueron los de Modric los que cantaron victoria. Marruecos sigue siendo la selección con menos puntuación del ranking ELO, pero llega más cerca que nunca de los vigentes campeones.

El favoritismo de Argentina y Francia se basa principalmente en que su potencial ofensivo y en el gran momento de sus estrellas, Lionel Messi (cuatro goles y dos asistencias) y Kylian Mbappé (cinco goles y dos asistencias). Sin embargo, Croacia y Marruecos les superan con diferencia en la parcela defensiva. Los galos han encajado en todos sus partidos del Mundial y la Albiceleste ha recibido cuatro tantos con seis disparos a puerta, más del doble de los goles esperados, según datos de Opta. Esta estadística calcula la probabilidad de que una acción acabe en gol teniendo en cuenta variables como la posición del disparo, el tipo de remate o la posición del portero. En esta parcela, Croacia y Marruecos son auténticos expertos. Los ajedrezados han encajado menos de la mitad de los goles esperados, y los marroquíes, casi una quinta parte.

El enfrentamiento entre estilos tan opuestos apunta a la eficacia como el factor decisivo de las semifinales. En octavos y en cuartos, Argentina lo pasó mal para superar a Australia y Países Bajos, a pesar de disparar 27 veces, el que más en las eliminatorias, una de cada tres a puerta. 11 de ellos fueron obra de Leo Messi, el jugador que más disparos hizo, autor de un gol en ambos partidos. Croacia también tuvo problemas para convertir ante Japón, pero contra Brasil, anotó con su único disparo a puerta.

En la otra eliminatoria, se enfrenta el equipo que más remata contra el que menos pisa el área contraria. Contando sus partidos de octavos y cuartos, Francia ha acertado entre los tres palos más de la mitad de sus disparos y uno de cada cinco ha acabado en gol. Marruecos hizo menos remates entre sus dos partidos ante España y Portugal que los de Francia en su duelo contra Polonia, pero mantiene la misma proporción de un gol por cada cinco tiros a puerta.

La estrella francesa, Kylian Mbappé, tuvo una actuación discreta ante Inglaterra en cuartos y eso se notó en la producción ofensiva de su equipo. El delantero del PSG es el jugador más determinante del Mundial, seguido de su compañero de equipo, Lionel Messi. Ambos han participado en más del doble de anotaciones que los jugadores con más goles y asistencias de Croacia o Marruecos. Mbappé cuenta además con otros compañeros con una alta participación como Olivier Giroud (cuatro goles) y Antoine Griezmann (tres asistencias). Ninguna selección depende tanto en ataque de un jugador como Argentina de Messi. La mitad de las jugadas de la Albiceleste que han acabado en remate han pasado por sus botas (32 de 68).

Francia y Argentina tienen a los dos delanteros más en forma del Mundial, pero Croacia y Marruecos cuentan con los dos mejores guardametas. El croata Livakovic es el héroe de su selección hasta el momento con sus paradas en las tandas de penaltis ante Japón y Brasil. Su exhibición ante la Canarinha duró todo el partido con 11 paradas, el récord de este Mundial. Su media de remates a puerta detenidos es la más alta del torneo, un 86,4% (19 de 22). Enfrente, Emiliano Martínez ofrece las cifras más bajas de todos los porteros, con cuatro goles encajados en seis disparos a puerta (16,7% de paradas). En octavos y cuartos solo realizó una atajada y encajó tres goles. Su redención llegó en la tanda de penaltis ante Países Bajos con dos paradas decisivas.

En el otro duelo, los números señalan un mayor número de paradas por parte del francés Lloris, exigido especialmente en su duelo de cuartos ante Inglaterra. Sin embargo, el portero galo no ha conseguido dejar su puerta a cero en ningún partido, mientras que el marroquí Bono ha detenido todos los disparos de los rivales, incluidos tres penaltis en la tanda ante España. Los de Luis Enrique llegaron a los octavos como el equipo más goleador del torneo, y se quedaron a cero. Portugal también sumaba más goles que nadie en los cuartos, y corrieron la misma suerte.

Bono fue elegido como el mejor jugador del partido en las dos eliminatorias, pero la labor de dejar la portería imbatida estuvo repartida por todo el campo. Marruecos es el equipo con más jugadores liderando la lista de balones recuperados e intentos bloqueados. Los rivales apenas pueden disparar en condiciones, y por eso solo ocho de los 44 disparos que ha recibido han ido entre los tres palos (17,8%).

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