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Wimbledon y el gran lío de la covid

El grande británico delega en el tenista la decisión de jugar o no si se contagia y de informar de los positivos, pero los profesionales desconocen la normativa

Berrettini, la semana pasada en las instalaciones del All England Club Tennis & Croquet Club.
Berrettini, la semana pasada en las instalaciones del All England Club Tennis & Croquet Club.Getty
Alejandro Ciriza

El lunes por la noche, la organización de Wimbledon notificó el positivo por covid de Marin Cilic. A la mañana siguiente trascendió el de Matteo Berrettini, uno de los candidatos a la victoria final y en paralelo, Alize Cornet aseguraba en el diario L’Èquipe que no entendía la “psicosis” y que se podía montar una muy gorda porque durante el último Roland Garros “hubo un brote del que no habló nadie”. Añadía la francesa que “buena parte del vestuario estaba contagiado” y que cuando se descubra que varios “jugadores importantes lo tuvieron” se iba a provocar un gran “incendio”. Ahora bien, horas después y viendo el efecto que habían tenido sus declaraciones, la gala recogía cable: “Dije que ‘sospechaba’ de algunos casos, sin tener ninguna prueba. Se trataba, sobre todo, de subrayar que el virus forma ya parte de nuestras vidas y que debíamos afrontarlo. Punto y aparte”.

Así comenzó el enredo: Wimbledon, la covid y la responsabilidad individual, ¿jugar o no jugar? La gran nebulosa, porque unos dicen no saber nada, otros que no lo tienen claro, que sí pero que no, y están aquellos últimos que dicen haber oído algo en el vestuario y que atribuyen la decisión última al jugador. El torneo confirma esto último, luego recae en el tenista la posibilidad de hacerse el test, comunicar o no si ha dado positivo y elegir en última instancia si compite o no en el caso de que le haya atrapado el coronavirus. Berrettini y Cilic, hechos polvo, optaron por desaparecer del cuadro. Baja especialmente significativa la del italiano, que había aterrizado en Londres después de ganar Stuttgart y en Queen’s, y que apuntaba muy alto porque, de hecho, el curso pasado alcanzó la final del major.

“¿Se han hecho un test? ¿Pero si no se hacen test ya, no?”, se preguntaba Paula Badosa, sin saber la catalana –enfrentada este jueves a Irina Bara (60ª del mundo)– que sus compañeros se habían despedido del torneo. “¿Si me preocupa esto? No, porque he pasado todos los covid que existen y de todos los colores, así que entre la vacuna y todo lo demás creo que estoy más que a salvo”.

Por la tarde tomaba la palabra Rafael Nadal, al que el virus le dio un buen empellón en diciembre y que, como tantos otros, no terminaba de tenerlo claro. “Si tú das positivo, estás fuera”, decía el balear, citado hoy (hacia las 16.00, Movistar Deportes) con Ricardas Berankis (106º). “Esa es la información que yo tenía hace unos días, pero era incorrecta porque me lo dijo un fisio de la ATP. No sé cuál es la información real, no sé si a mí me han comunicado el protocolo. A lo mejor se nos ha comunicado y a mí se me ha pasado”, expresó el mallorquín, quien, en cualquier caso, considera que los tenistas no deben intervenir en cuestiones de protocolos: “Nosotros no estamos preparados para tomar esas decisiones. Somos tenistas, no especialistas en salud. Tienen que tomar esas medidas los que están preparados. Todos podemos opinar sobre todo, pero esto se convertiría en un circo”.

Bautista: “Creo que yo jugaría”

Después de que cancelara el torneo en 2020 –por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial– y diera forma a una edición descafeinada hace un año, condicionada por las restricciones, Wimbledon ha recuperado en este 2022 la normalidad. Los jugadores, sus equipos, el personal del torneo y los periodistas pueden transitar con libertad por las instalaciones del All England Club Tennis & Croquet Club. El grande británico sigue las directrices del Gobierno, que en julio de 2021 eliminó todas las limitaciones y delegó en la responsabilidad individual de la ciudadanía a la hora de combatir contra la covid.

Una disposición que a Roberto Bautista, particularmente le gusta. “Me parece perfecto que la organización permita decidir al jugador en función de cómo se sienta”, desliza el castellonense, que este jueves se batirá con Daniel Galán. “Parece que esto del coronavirus ha pasado o está prácticamente aparcado. Si yo lo tuviera… No lo sé, pero he jugado muchas veces con fiebre o enfermo. Creo que jugaría, aunque con precauciones de cara al resto de los jugadores”, prosigue, admitiendo que no ha recibido ninguna coordenada sobre qué se debe hacer o no en Londres.

Previamente, en París la regla estaba clara. Según ha podido confirmar este periódico, por las especificaciones de la Federación Francesa (FFT) y de la ley francesa no se podía obligar a los tenistas a hacerse las pruebas; eso sí, en el caso de que alguno de ellos hubiera dado positivo, debería haberlo notificado de inmediato a la organización de Roland Garros.

Responsabilidad individual... y colectiva

“No recuerdo casos, no tengo esa información. Espero no verme en esa tesitura, pero actuaré de la manera más responsable posible”, señala Nadal, que hace dos años renunció a viajar al US Open al considerar que no había las suficientes garantías sanitarias. “No quiero infravalorar el efecto de la covid, pero hay torneos en los que muchos jugadores se intoxican con la comida, pero no por ello vamos a hacer un protocolo. Llevamos mucho tiempo con el virus, hay vacunas... Si volvemos a como estábamos hace unos meses, dejaré de jugar”, expuso la francesa Cornet.

Mientras tanto, en Londres siguen las dudas y Wimbledon confía en que los casos de Cilic y Berrettini sean aislados. “Tengo entendido que se puede competir, lo he escuchado antes del partido en la sala del fisio; si coges el covid puedes competir, no te echan del torneo como pasaba antes. Se lo he escuchado a un jugador. Al parecer Berrettini y Cilic se encontraban mal y seguramente estarán jodidos. Debemos tener cuidado para que no se propague por el torneo”, advertía Feliciano López, que después reconocía: “No sé la norma realmente, si podían jugar o no, pero creo que las cosas están yendo bien. Que yo sepa, no ha habido muchos casos en los torneos. No creo que haya habido cosas raras y que los jugadores lo hayan tapado”.

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Sobre la firma

Alejandro Ciriza
Cubre la información de tenis desde 2015. Melbourne, París, Londres y Nueva York, su ruta anual. Escala en los Juegos Olímpicos de Tokio. Se incorporó a EL PAÍS en 2007 y previamente trabajó en Localia (deportes), Telecinco (informativos) y As (fútbol). Licenciado en Comunicación Audiovisual por la Universidad de Navarra. Autor de ‘¡Vamos, Rafa!’.

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