El viaje más feliz de Nujeen, la refugiada siria que más sabe del Barça
La conmovedora historia de una niña kurda protagoniza la campaña de Navidad del club azulgrana
Nujeen Mustafá (Alepo, Siria; 18 años) cuenta que decidió hacerse del Barça a los cinco años, a pesar de que aquello iba a despertar cierta polémica en casa. Su hermana, algo mayor, era del Real Madrid. Y ella “¡ya estaba harta!”. Cuando lo explica, una carcajada rompe el silencio del Auditorio 1899 del Camp Nou, donde es la invitada de honor. Ella es la protagonista de la campaña de Navidad del FC Barcelona, la de la historia de superación de una joven refugiada siria con parálisis cerebral a la que no ha podido frenarle nada: ni la guerra, ni la silla de ruedas. Con ella se metió en una minúscula lancha el 2 de septiembre de 2015, el mismo día que se hizo viral la foto del pequeño Aylan, muerto, varado en una playa de Turquía. Nujeen tuvo mejor suerte.
Dejó Alepo, dejó atrás las bombas. Y se convirtió en una refugiada más —hay 67 millones de desplazados en el mundo y la mayoría de ellos vive en países fronterizos, apuntó Maria Vallés, directora de la Fundación FC Barcelona—. Desde entonces reside en Colonia (Alemania) con dos de sus hermanos. Y hasta allí fue a buscarla Manu, el chófer del autobús del equipo de fútbol del Barça y en el bus oficial (1.360 kilómetros), para hacer realidad su sueño.
El club azulgrana supo, al conocer su historia, que cuenta en el libro Nujeen, biografía escrita por la periodista Christina Lamb —la misma autora de Yo soy Malala (la más joven ganadora del Nobel de la Paz)—, que su afición al fútbol le ayudó a superar los peores momentos de su vida: “Soy una chica normal que se siente como cualquier otra persona, pero que ha sufrido mucho, que ha pasado por y visto muchas cosas. Alguna vez pensé que el futuro sería muy negro, pero en esos momentos difíciles me ayudó ser una gran seguidora del Barça”, explicó ayer, en un perfecto inglés, pues su condición física no le ha impedido dominar hasta cuatro idiomas.
Con El sueño de Nujeen —la campaña incluye un delicado minidocumental sobre la historia y el viaje de Manu y la joven siria, un spot y una página web— el Barcelona quiere dar visibilidad a los colectivos menos favorecidos, mejorar la percepción que la ciudadanía tiene de los refugiados y promover el deporte como una herramienta de transformación social. “Queríamos buscar una manera distinta de felicitar la Navidad, por eso hemos decidido contar una historia de superación como la de Nujeen”, aseguró el presidente, Josep Maria Bartomeu.
La joven kurda está disfrutando, junto a parte de su familia, del viaje de su vida. Tras recibir de manos de Manu un mensaje de Piqué en el que el central del Barcelona la invitaba a visitar el estadio azulgrana no cabe duda de lo primero que hizo nada más llegar a la ciudad condal. “¿Quieres que vayamos a ver la Sagrada Familia?”, le preguntó aquel. “No, vamos directos al Camp Nou”, respondió ella. Allí se encontró por primera vez a Bartomeu, a quien le regaló su libro y después de disfrutar en el palco del partido contra el Celta también conoció a Piqué y a Ter Stegen. Unos días más tarde visitó la ciudad deportiva y comprobó que Iniesta “es tan buena persona como parece”, tal y como le había consultado al presidente. Y conoció, por fin, a su ídolo, Messi.
Todavía podrá disfrutar del clásico como nunca antes. Como nunca hubiera imaginado. Se marchará de vuelta a casa con una camiseta con su nombre y muchos recuerdos. Quién sabe si superarán la alegría que le desbordó el día que Iniesta marcó aquel golazo en Stamford Bridge. Aquello, claro, fue en 2009. Y la guerra no había estallado en Siria.
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