Neymar juega al escondite con el Barça

El Barcelona pronto se dio cuenta de que poco o nada puede hacer en las negociaciones de Neymar con el PSG. Le bastó con la primera reunión, en Estados Unidos, con el padre del futbolista, que se sentó en la mesa para exponer la oferta que tenían del equipo parisino y se desmarcó de la voluntad de su hijo. “Pero eso hay que cogerlo con pinzas porque puede ser una estrategia para desviar la atención y al final él buscará lo que crea mejor para su hijo”, replican desde el club azulgrana. De esa reunión ni de las dos siguientes nada más se extrajo. Entre otras cosas porque según cuentan desde las oficinas del Camp Nou, nadie les ha dicho claramente que Neymar se quiera ir del Barça. “Los encuentros no sirvieron de nada porque aunque suponemos que es cierta la oferta del PSG, no nos dijeron que el jugador tenga ya tomada la decisión de jugar en París”, exponen desde el club; “así que mientras que el futbolista no desvele públicamente sus intenciones, nosotros queremos que se sienta cómodo en el Barcelona y pelearemos para que se quede”.

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Esa pelea, sin embargo, no incluye dinero. “Ya renovó el año pasado —hasta junio de 2021— y tiene un contrato en vigor”, cuentan desde la ciudad deportiva; “pero es que el padre del jugador tampoco nos pidió un aumento de sueldo ni nada parecido”. El padre de Neymar dbe recibir en estos días los 26 millones estipulados por la renovación de dicho contrato y por la ampliación de la cláusula, que ahora está en 222 millones y que en la próxima temporada ascenderá a 250. “Esa es la cláusula. Y si lo quieren, tendrán que pagarla. Todo lo demás es mera especulación”, aseveran con rotundidad desde el Barcelona. El club azulgrana ha decidido depositar en una notaría los 26 millones de euros de prima. Se trata de una medida preventiva. La directiva de Bartomeu considera que la prima de renovación del jugador podría ser modificada en el caso de que se marche al PSG.

Aunque tampoco nadie del club parisino se ha dirigido al Barça, por lo que no han empezado las negociaciones en el caso de que las vaya a haber. “No hemos hablado con nadie del PSG, así que no sabemos qué harán en caso de que al final Neymar decida irse”, exponen desde la entidad azulgrana. Del mismo modo, desconocen si la voluntad del conjunto francés es incluir jugadores en la operación, tal y como se ha publicado, con el nombre de Di María por medio. “No nos interesa entrar en este juego. Si todavía no nos han dicho ni hola, ¿cómo vamos a valorar eso?”, se cuestionan. Y añaden: “Por lo que tampoco nos planteamos la forma en que abonarán el pago”. Se refieren a que desconocen si el PSG pretenderá negociar [abonando más dinero para que no sea el pago de la cláusula y así evitarse los impuestos] o presentar a Neymar en las oficinas de la Liga con los millones. En ese caso, el Barça actuará de oficio y denunciaría a la UEFA la voluntad de saber de dónde procede el dinero. “Eso no lo ha dicho nadie del club”, se defienden desde el Barcelona. Pero se da por hecho.

También se baraja la opción de que el brasileño haga hoy una escala en Doha de vuelta de China —donde el jugador ha sido la imagen del Barça en unos actos publicitarios— y realice la revisión médica como la hiciera en su día el propio Di María. Resulta que el PSG tiene un acuerdo con el centro Aspetar de Doha y ya hay un médico brasileño preparado en el Departamento de Medicina del Deporte. “No tenemos confirmación oficial, pero no nos extrañaría”, resuelve un trabajador de Aspetar. Aunque, como ocurre con todo lo que envuelve al fichaje, es indefinido y difuso.

Así, con la operación congelada y a la espera de qué va a hacer Neymar —“la una única vía es que se pronuncie”, convino Iniesta en un sentir que cada vez es más generalizado dentro del vestuario azulgrana porque no se habla de otra cosa—, el Barça aguarda también si el PSG rompe o no el fair-play financiero, toda vez que ya fue sancionado con 60 millones de multa en 2014 por dicho motivo y que podría tener un castigo mayor, como quitarlo de competiciones europeas o limitarle el número de jugadores inscritos, además de dejarle varias ventanas de mercado sin poder contratar a ningún futbolista.

Coutinho, sí o sí

La marcha de Neymar abriría el abanico de fichajes del Barça. “Si eso ocurriera, los clubes nos estarán esperando porque saben que tendríamos dinero y ahora parece que pedir 100 millones por un jugador es normal”, se lamentan. “Pero está claro que atenderemos a los grandes nombres”, añaden. Se especula con Griezmann, Dybala, Mbappé... pero el que está claro que quieren de momento es Coutinho (del Liverpool), independientemente de si el 11 hace las maletas o no para París. Un fichaje que parece cercano porque el acuerdo con el futbolista existe, pero falta por negociar con el club inglés. “Es un futbolista que puede jugar de volante y de extremo”, recuerdan desde el Barça. Y es por eso por lo que, en caso de traer a Coutinho, el club solo ficharía a Paulinho o Verratti, pero no a los dos. “Pero hay más nombres, ¿eh?”, desvelan desde el club azulgrana.

Por ahora, Neymar habla de nimiedades o de sus marcas en las redes sociales, también sobre el césped con sus pies porque ha sido el pichichi de la gira norteamericana con tres dianas. Pero no dice ni pío sobre lo que quiere ser, si el líder del PSG o el escudero de Messi. Por lo que el culer y también el Barça siguen a la espera de acontecimientos.