“Hay que ganar, no queda otra”

La misión está casi cumplida. Argentina está allí, donde quería estar: a punto de encarar la tercera final consecutiva en tres años y con todas las miras puestas en ganar, por fin, un campeonato tras 23 años de frustraciones. La Albiceleste se presta a jugar otra final y, más allá de lo que haga el rival que resulte de la otra semifinal, Chile o Colombia, El Tata entiende que existe una presión extra a los partidos que ya jugaron sus dirigidos: la que pueda ejercer la prensa, o bien, buena parte de ella; la que espera un tropiezo argentino para volver a lanzar críticas hacia el proceso del rosarino.

“Nuestra preocupación era ganar el partido de hoy y volver a instalarnos exactamente donde estábamos hace un año atrás y estos muchachos, exactamente dos años atrás. Prepararemos el partido pensando que somos finalistas y con el rival que nos toque mañana”, se sinceró Martino en conferencia de prensa.

Luego fue menos diplomático: “El reconocimiento (del equipo) exclusivamente dependerá del resultado de la final. No es mi pensamiento, es el de los periodistas. Si se pierde, no creo que vayamos a ser reconocidos. Lo vi estando de afuera en la final con Alemania, porque el equipo había hecho quizás uno de los mejores partidos. Hoy nos falta un partido y para cambiar esto hay que ganarlo, no queda otra. No quiero tener razón sobre lo que digo pero estoy convencido de que es así”.

Pero, ¿qué cambió de hace un año a esta parte? “Parte del secreto de volver a estar en una final fue preocuparnos más por el equipo, olvidarnos de situaciones extrafutbolísticas y que se produjeron en otro momento”, reconoció Martino, “Nos tenemos que enfocar en esto y desde que se perdió la final en Brasil, estos jugadores se propusieron tener otra oportunidad. En la Copa América de Chile no lo pudimos hacer y en esta han logrado nuevamente llegar a la final. Cuando me preparaba para venir al estadio pensaba en Ortega en el Mundial de Francia, en Bielsa en 2002, en Pékerman en 2006. Siempre pasó y seguirá pasando, no es ninguna novedad y es lo mismo que cuando te toca dar una lista: siempre hay uno que no va a poder estar”.

“No es necesario saber si somos el mejor o no, lo necesario era ganar los partidos, ser mejor que los rivales y volver a instalarnos en una final. Recién ahora nos permitiremos pensar en estar en una final y mañana a la medianoche en quién será el rival”, reflexionó.

Consultado acerca del récord logrado por Lionel Messi, quien se convirtió en el máximo artillero en la historia de la celeste y blanca,  El Tata dijo que lo “pone muy feliz que Leo haya hecho eso, muy contento que haya sido en esta Copa América, seguramente él está muy feliz por esto y como piensa mucho más en el equipo, estará mucho más contento por la actuación del equipo, pero está muy bien que el mejor futbolista del mundo sea el goleador histórico de la selección argentina”. “Me emociona que él (por Messi) se haya tomado un segundo en firmar el autógrafo”, respondió cuando le preguntaron acerca del hincha que ingresó antes de comenzar el segundo tiempo.

“Estoy feliz que de los últimos 18 partidos de las tres Copa América pude dirigir en todos”, manifestó el conductor de Argentina y Paraguay en los últimos certámenes y aunque no arriesgó un resultado para la semifinal de este miércoles entre Colombia y Chile, se las apañó para echarle algo de sal a uno de esos equipos.

“No somos los mejores elaborando ni presionando pero hoy lo hicimos muy bien. Esto lo deberíamos hacer con equipos que elaboran y presionan mejor como Chile. Si queremos jugar a eso tendremos que competir contra esos rivales, con Chile y con Alemania seguramente. Hoy lo hicimos durante todo el partido pero no estaban ninguno de esos rivales”, dijo, pícaro, Martino. Y por si el maleficio no surte efecto, repitió el concepto: “Chile ha estado en los últimos tiempos en los lugares donde tiene que estar, desde Sudáfrica 2010”.