Lituania funde a Italia
Liderados por Kalnietis, los verdugos de la 'azurra' se jugarán la final con Croacia, que bate a Ucrania
La meritoria Italia de Belinelli chocó contra el muro lituano. La bravura del conjunto de Pianigiani, ausente de puntería desde el perímetro, se encontró una batería de torres inabarcables y con un excelso director de orquesta de nombre Mantas Kalnietis. Bajo la dirección de su base, 36 minutos en pista y gobernador absoluto del encuentro, Lituania se ganó el pase a semifinales donde se encontrará con Croacia. Sin opción en la batalla del rebote y sin triples Italia se apagó no sin antes apurar su rendición.
Kalnietis y Darjus Lavrinovic aprovecharon la balbuceante puesta en escena de Italia para tomar el mando del partido. El dominio en el rebote y su notable porcentaje de acierto en el tiro marcaron el primer estirón de Lituania (20-12, m. 8). No fue muy lejos.
LITUANIA, 81 - ITALIA, 77
Lituania: Kalnietis (17), Seibutis (17), Maciulis (13), Kleiza (5), Darius Lavrinovic (9) –equipo inicial-; Motiejunas (7), Kuzminskas (0), Pocius (11) y Valanciunas (2).
Italia: Cinciarini (11), Bellinelli (22), Aradori (6), Datome (10), Cusin (4) –equipo inicial-; Gentile (15), Rosselli (0), Melli (2) y Diener (7).
Parciales: 22-15, 18-24, 17-19 y 24-19.
Árbitros: Belosevic (Srb.), Bultó (Esp.) y Javor (Esl.).
Stozice Arena de Liubliana. 8.200 espectadores. Lituania jugará el viernes la semifinal contra Croacia (17.45, Cuatro).
La aparición de Belinelli y, sobre todo de Diener, permitieron a los de Pianigiani recomponer la figura. Siete puntos en el segundo cuarto del base nacionalizado aliviaron la producción de perímetro italiano y compensaron la hiperactividad de Kalnietis. Bastaron un par de arrebatos episódicos de Gentile y Cinciarini para que los azzurri culminaran, a la vuelta de los vestuarios, su remontada en el marcador (40-41, m. 21).
La pizarra de Kazlaukas era incapaz de traducir en puntos la superioridad de efectivos y centímetros de su juego interior, pero aun así la intensidad de Pocius en defensa y en ataque y la infalibilidad de Kalnietis fueron argumento suficiente para que Lituania se agarrara al partido. El base del Lokomotiv, exprimido a jornada intensiva por la ausencia de un recambio de garantías, mantuvo durante el tercer cuarto un mano a mano con Gentile que elevó la intensidad en la gestión del encuentro y ajustó los guarismos rumbo a la recta final merced a los puntos de Cinciarini y Datome, destemplado hasta entonces, (57-58, m. 30).
Apenas había rastro de Valanciunas, Kleiza y Kuzminskas, pero Italia no encontró el interruptor del 6,75 que tantas veces había iluminado su juego y su vela se fue consumiendo con el paso de los minutos. Kazlaukas siguió agitando su rotación y luciendo repertorio y, con los puntos de Seibutis y Motiejunas, la diferencia creció hasta el 71-58 a falta de cuatro minutos. Inalcanzable incluso para el febril voluntarismo italiano.
Croacia alcanza las semifinales 18 años después
CROACIA, 84 - UCRANIA, 72
Croacia: Ukic (9), Simon (23), Bogdanovic (14), Markota (12), Tomic (6) -cinco inicial-, Draper (6), Saric (7), Rudez (7) y Zoric (0).
Ucrania: Jeter (19), Gladyr (13), Lypovyy (7), Korniyenko (4), Natyazhko (10) -cinco inicial-, Pustozvonov (0), Mishula (2), Zabirchenko (2), Zaytsev y Kravtsov (15).
Parciales: 22-22; 29-13; 19-26 y 14-11.
Árbitros: Juan Arteaga (ESP), Olegs Latisevs (LET) y Emin Mogulkoc (TUR). Eliminado por cinco personales Zoric (min. 38).
Stozice Arena de Liubliana: 7.700 espectadores.
No pudo empezar peor. No ha podido reaccionar con mayor determinación. Croacia, que debutó en el campeonato con una sonrojante derrota ante España (68-40), completó su octava victoria consecutiva, cumplió los pronósticos, superó a Ucrania (84-72) y alcanzó las semifinales del torneo 18 años después.
Croacia inició su andadura competitiva como nación independiente en los Juegos de Barcelona 92, colgándose la plata tras caer en la final ante el legendario Dream Team estadounidense. Después llegaron los bronces en el Europeo de 1993, en el Mundial de 1994 y, de nuevo, en el Eurobasket de 1995. Pero ahí se truncó la secuencia y arrancó una errática andadura que en Eslovenia parece haber tocado a su fin.
Las manos rápidas de Dontaye Draper (seis asistencias y cuatro robos de balón) y la intensidad defensiva del conjunto de Repesa derritieron la resistencia ucraniana. El base del Real Madrid lideró la presión adelantada que asfixió a su rival con un contundente parcial de 19-1 que rompió el partido. Del 25-28 a favor de Ucrania se pasó al 44-29 croata. Jeter (19 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias) apuró la reacción ucraniana, pero Simon, con 23 puntos selló el pase a semifinales de Croacia. A la espera de culminar su regreso al podio europeo y a la lucha por las medallas, los de Repesa se aseguran el billete para el Mundial de 2014.
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