Di Stéfano y Cruyff critican el conservador juego del Madrid y Mourinho

Unidos por una misma causa: Mourinho. A dos días para el segundo clásico, todavía colea la batalla que libraron Madrid y Barça el pasado sábado en el Bernabéu, en la que detrás del reparto final de puntos se esconden dos formas muy divergentes de concebir el fútbol. Así lo entienden dos buques insignia de ambos equipos, Alfredo Di Stéfano y Johan Cruyff, que inciden en su análisis del encuentro en el pobre planteamiento del técnico portugués. "El Madrid fue un equipo sin personalidad", defiende La saeta rubia en un artículo publicado hoy en el diario Marca.

Di Stéfano, que es presidente de honor del Madrid, ensalza la propuesta del Barça y subraya las carencias del conjunto madridista. "La superioridad de los culés fue manifiesta y exteriorizada al planeta entero", apunta. "Ellos tienen algo que el Madrid no tiene. El equipo blanco jugó acorralado ante un rival que dominó el medio campo durante todo el partido. El Barcelona hace fútbol y baile, el Real Madrid iba y venía constantemente", añade Di Stéfano, que elogia sobremanera el papel de Busquets, Xavi e Iniesta. Y, claro, a Messi: "Es el mejor del mundo. Su fútbol es espectacular y es un ejemplo de profesionalidad. No tiene rival".

"Cuando los medios del Barça, dormían hasta las ovejas pasándose el balón con maestría, cortita y al pie", señala. En la misma línea, Cuyff remarca la superioridad azulgrana con la pelota y critica la disposición táctica de Mourinho. "El elogio más grande al Barça lo dio Mourinho con su alineación", defiende el holandés en su columna semanal en El Periódico. "Para jugar en casa con siete defensores has de tener mucho miedo y el Bernabéu no suele permitir planteamientos así a sus técnicos", arranca el texto, en el que el técnico del Dream Team cuestiona la estrategia del luso.

"Miedoso pero listo. Así es Mourinho", expone. "La rueda de prensa previa al partido le sirvió para la comparecencia posterior al clásico. Eligiendo a quién respondía y a quién no, insistiendo en el discurso de yo con 10, ellos siempre con 11, no tuvo que dar explicaciones de por qué alineó a tantos defensas. ¿Molestó su comportamiento? A unos sí y a otros no. Y en la división halló el escudo para hablar de todo menos de fútbol", añade Cruyff, que también pone en tela de juicio la proyección mediática del preparador portugués "Es un entrenador de títulos, no de fútbol", afirma.

El mismo énfasis que emplea Cruyff, lo utiliza Di Stéfano para destacar las virtudes del Barça. "Los éxitos que consigue son producto de una mentalidad atacante, de una sabiduría que va madurando (...). Resulta evidente que el Barça es superior al Madrid e intentar armar jugadas ofensivas basadas en el contraataque no es la forma más apropiada de intentar sorprenderles", sentencia el argentino. "Yo, de Mourinho, entrenaría ya no el 10 contra 11, sino el 9 contra 11", prolonga Cruyff, que opina que "en el caso de ubicar a Pepe en el mismo, lo más normal es que no acabe el partido".

El holandés, contundente, añade que el clásico del sábado le recordó a la final del Mundial de Sudáfrica en la que España superó el rácano planteamiento de Holanda. "Los mismos que ahora aplauden las argucias de Mourinho con su Madrid, ese día se enfadaron, y con razón, con el planteamiento de los holandeses". En contraposición, Di Stéfano concluye: "El fútbol del Barça no se mira con los ojos sino con el alma. Trabajan la pelota con respeto, adoración, casi mimándola. Ver a este equipo en acción es un deleite para todos".

Real Madrid 1 - Barcelona 1