El 'pincharrata' vuelve a reina
Estudiantes, la escuela de Bilardo, festeja su cuarta Libertadores
La escuela de Carlos Bilardo conquistó el miércoles por la noche la Champions suramericana. El Estudiantes de La Plata (Argentina), el club donde Bilardo alcanzó el éxito como mediocentro y entrenador, ha coronado otra gesta: perdía 1-0 la final de la Copa Libertadores ante el Cruzeiro en Belo Horizonte (Brasil), pero dio la vuelta al marcador (1-2) con goles en los minutos 12 y 27 del segundo tiempo. El ex entrenador de la selección argentina y Juan Ramón La Bruja Verón habían ganado como jugadores del Estudiantes tres Libertadores (1968, 1969 y 1970) y una Intercontinental (1968), dando la vuelta olímpica en Old Trafford ante el Manchester United. Un entrenador discípulo de Bilardo, Alejandro Sabella, y el hijo de La Bruja, el medio campo Juan Sebastián La Brujita Verón, recuperaron la llamada mística copera del Estudiantes 39 años después. Fueron aguerridos, habilidosos y sedientos de victoria, como marca la escuela.
La Libertadores no mueve tanto dinero ni es un espectáculo como la Champions, pero los hinchas suramericanos enloquecen por ella. El Estudiantes tampoco es el Barcelona, pero el conjunto rojiblanco ya sueña con vencerlo en el Mundial de Clubes, que se celebrará en diciembre en Dubai (Emiratos Árabes). El pincharrata -entre los primeros hinchas de este club centenario había estudiantes de Medicina que diseccionaban ratas en sus investigaciones- está asentado en La Plata, la quinta ciudad de Argentina en población (833.000 habitantes), 56 kilómetros al sur de Buenos Aires, pero sus gestas de los años sesenta agrandaron tanto a su hinchada que se les considera el séptimo club más popular del país. Por eso la fiesta del miércoles se extendió más allá de la capital de la provincia de Buenos Aires.
Al Estudiantes de los sesenta se le acusaba de ser el antifútbol, por su falta de juego limpio, pero también contaba con jugadores exquisitos y valientes. El Estudiantes de 2009 fue bien definido por uno de sus jugadores veteranos, el atacante José Luis Calderón, que jugó los últimos minutos de la final: "Siempre hay que ganar, aunque sea con un gol de diferencia. La mística la metemos en estos partidos. De nuevo ganamos a lo Estudiantes: metiendo, corriendo y jugando".
Los protagonistas de la hazaña son varios. El conductor fuera del campo fue Sabella, ex atacante, que había sido dirigido por Bilardo en el Estudiantes campeón argentino de 1982. Sabella comenzó a entrenar al León de La Plata en abril, cuando la Libertadores ya había comenzado, y hasta ahora se mantiene invicto. En el festejo del miércoles, le regaló su cazadora a Bilardo, que había viajado a Belo Horizonte junto a otros 4.000 hinchas.
El domador dentro del campo fue Verón, que había vuelto en 2006 al club después de 10 años en el fútbol europeo, donde ganó ligas con el Lazio, el Inter y el Manchester United. La Brujita quería repetir las hazañas de su padre. "Seba volvió para hacer algo lindo", declaró el jueves La Bruja. Apenas regresó al León, su hijo logró la liga argentina y en la final del miércoles intervino en los dos goles que arruinaron el festejo de la Raposa, como le llaman al Cruzeiro. Juan Sebastián inició la jugada que terminó coronando Gastón Fernández, un atacante nacido en el River Plate, y ejecutó el tiro de esquina que acabó en la red con un cabezazo de Mauro Boselli, el goleador de la Libertadores, surgido del Boca Juniors y de fugaz paso por el Málaga B. Verón, de 34 años, ha vuelto hace unos meses a la selección argentina, entrenada por Diego Maradona y cuyo manager es Bilardo.
El nuevo portero de la albiceleste es el del Estudiantes, Mariano Andújar. La defensa pincharrata está compuesta por Cristian Cellay, Rolando Schiavi (un veterano que jugó en el Boca y el Hércules y que vino cedido por el Newell's para jugar los últimos cuatro partidos de la Libertadores), Leandro Desábato y Germán Ré. En el medio, los canteranos Enzo Pérez y Leandro Benítez son las puntas de lanza que acompañan a Verón y Rodrigo Braña.
El Estudiantes, que preside Rubén Filipas, escapó del descenso en 2004 con la conducción de Bilardo y desde entonces inició una etapa de grandes resultados. Acaba de ganar su cuarta Libertadores, una marca sólo superada por el Independiente (Argentina), el Boca y el Peñarol (Uruguay).
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.