El aumento de la lectura se consolida en España y despega el audiolibro
Un estudio sobre el mercado editorial en 2021 registra una ligera subida en las ventas y el estancamiento del soporte digital. Más del 35% de la población no lee nunca
El confinamiento de 2020 acercó a la población española a los libros y ese hábito lector se prolongó a lo largo de 2021, según se desprende del último Barómetro de hábitos de lectura y compra de libros, presentado en el Ministerio de Cultura este miércoles. Los resultados de la encuesta —realizada por la empresa Conecta a 5.011 españoles distribuidos por todo el territorio y con un margen de error del 1,41 %— sitúan en un 64,4% el porcentaje de españoles que incluyen la lectura entre sus actividades de ocio, el 52,7% con frecuencia semanal. El estudio también muestra que el audiolibro, cuyo mercado está firmemente asentado en el mundo anglosajón, despega en España.
Las mujeres en todas las franjas de edad son quienes más leen. Los porcentajes más altos de lectoras corresponden a aquellas que tienen entre 14 y 24 años (79,5%) y entre 55 y 64 años (77,2%). También son ellas quienes más consumen audiolibros, un producto al que accedieron un 5,2% del total de encuestados, lo que arroja un crecimiento de este formato de más de dos puntos porcentuales en un año.
El estudio también muestra que casi siete de cada 10 encuestados (67,9%) leyó al menos un libro el año pasado, mientras continúa en ascenso el número de compradores de libros no de texto, que se situó en el 52,3%, 10 puntos porcentuales por encima de la cifra de hace una década. Las librerías y cadenas siguen siendo el principal lugar donde se adquieren ejemplares, pero las ventas por internet continúan creciendo. Uno de cada cuatro encuestados hizo su última compra de libros por este canal.
Aumento de las descargas ilegales
En cuanto al libro electrónico, “el soporte digital ha tocado techo”, ya que se reduce por primera vez al 29,4% el porcentaje de lectores en este formato, según explicó en la presentación del informe el responsable del mismo, Óscar Chicharro. Aumentan los lectores que pagan por hacerse con los libros digitales (el 43% de quienes consumen este formato), pero también crecen quienes se los bajan gratuitamente en sus dispositivos (60,3% frente al 55% del año anterior). Según apunta la encuesta y subrayó Chicharro, el 63,9% sabe cuándo estas descargas no son legales por lo que la piratería no es inconsciente en la mayor parte de los casos. Un 37,2 % de lectores frecuentes ―los que leen una o dos veces por semana como mínimo― optan exclusivamente por títulos editados en papel.
A pesar del aumento de lectores en España aún queda un 35,6% de personas que no lee nunca o casi nunca. La falta de tiempo es el principal motivo al que apuntan los que excluyen la lectura de su ocio, y de los no lectores, uno de cada cuatro admite falta de interés total por los libros. “Este porcentaje sigue siendo demasiado elevado”, apuntó el ministro de Cultura, Miquel Iceta. “Resulta más sencillo que quienes leen, lean más que quienes no leen se acerquen a los libros. El informe deja claro que a mayor nivel económico, mayor nivel de lectura. Esa barrera de más del 35% que no lee no es sencilla de derribar”. El plan de fomento de la lectura, que invertirá 13,2 millones de euros, y el bono joven son dos de las iniciativas a las que se refirió Iceta, acompañado en la mesa por Daniel Fernández, presidente de la Federación de los Gremios de Editores de España (FGEE), y de la directora general del Libro, María José Gálvez, para tratar de revertir el estancamiento de los hábitos lectores.
La caída de la lectura en la adolescencia vuelve a quedar plasmada en el informe: el 77,4% de los menores de entre 10 y 14 años es lector en su tiempo libre, pero este porcentaje cae casi 12 puntos a partir de los 15 (64,9%). Se aprecia otra caída entre la población mayor de 65 años, ya que un 57,4% de este sector es no lector, y los que leen con mayor frecuencia descienden al 42,6% en esta franja, un notable bajón respecto del 57,8% de lectores frecuentes entre 55 y 64 años.
La encuesta coloca a Madrid, País Vasco, Navarra, Cataluña, La Rioja y Aragón por encima de la media nacional en el porcentaje de lectores de libros por ocio. Por debajo de la media quedan Extremadura, Canarias, Andalucía y Castilla-La Mancha. En aquellas comunidades con lengua autonómica, de poder elegir, la mayoría prefiere leer en castellano. En Cataluña el 36,4% prefiere leer en catalán, en Baleares el 10,2% y en el resto de territorios con otras lenguas el porcentaje no llega al 10%. Más allá de las lenguas peninsulares, un dato sorprendente en lo relativo a otros idiomas es que el 27% de quienes escuchan audiolibros opta por productos en inglés.
La visitas a las bibliotecas públicas han aumentado ligeramente. Un poco más de uno de cada cuatro encuestados fue a ellas en 2021, pero la caída respecto a 2019 sigue siendo notable. El porcentaje de visitantes antes de la pandemia, según el informe, era del 32%. Las bibliotecas mejor valoradas son las de Cataluña, País Vasco, Castilla y León y Cantabria.
El Barómetro de hábitos de lectura es elaborado por la FGEE y está patrocinado por el Centro Español de Derechos Reprográficos (Cedro), en colaboración con Cultura. Esta iniciativa arrancó hace 20 años, pero quedó interrumpida entre 2012 y 2017 y, según destacó Fernández, en representación de los editores, un grupo de trabajo de la Comisión Europea estudia trasladar la metodología empleada para la elaboración del barómetro al resto de la UE. “Este informe permite evaluar la salud de la industria editora y del país, porque los hábitos de lectura conforman una radiografía del país”, subrayó Iceta.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.