El Museo Arqueológico de Sevilla desbloquea su rehabilitación tras una década de incumplimientos
El deteriorado estado del edificio impide exponer en él algunas de algunas de las joyas arqueológicas más importantes del Sur de la península Ibérica
Abierto en 1946 en el antiguo pabellón de Bellas Artes de la Exposición Iberoamericana de 1929, un espectacular edificio neorrenacentista diseñado por el arquitecto regionalista Aníbal González, el Museo Arqueológico de Sevilla despidió este miércoles una oscura etapa de su historia con el desbloqueo de su rehabilitación integral. Un hito que viene a subsanar el profundo deterioro de una sede cuyo estado de conservación impide, desde hace más de una década, exponer con plenas garantías de seguridad algunas de las joyas arqueológicas más importantes del Sur de la península Ibérica. Su caso ejemplar, a la cabeza, es el del tesoro del Carambolo, maravilla de la civilización tartésica formada por 21 piezas de oro y que debería ser la estrella de la colección (pero que hasta el día de hoy se custodia en la cámara acorazada de una entidad bancaria).
De este modo, el Arqueológico cerrará definitivamente sus puertas el próximo 12 de enero para preparar su rehabilitación, un proyecto diseñado por el arquitecto Guillermo Vázquez Consuegra que sufragará, como titular del museo, el Ministerio de Cultura; mientras que la Junta de Andalucía procederá a las labores de inventariado, embalaje y evacuación de su colección, cifrada en un millón de piezas. Estos trabajos de catalogación, que tendrán una duración de un año, culminarán a comienzos de 2021, fecha prevista por el gobierno autonómico para inaugurar una exposición en el antiguo convento de Santa Inés, que bajo el título Abierto por obras, acogerá una selección de sus obras más destacadas como sede transitoria del museo.
La consejera de Cultura de la Junta de Andalucía, Patricia del Pozo, realizó ayer el anuncio del traslado de las piezas en la sede del museo junto a la monumental Diana Cazadora, una pieza procedente del conjunto arqueológico de Itálica que permanece en el museo sevillano sin moverse desde 1947. A este respecto, la consejera confesó que se trata de una mudanza de “gran envergadura”, en la que se respetarán “rigurosamente los requisitos de seguridad, transporte y control de los parámetros ambientales a fin de conservar la colección con todas las garantías mientras dura la transformación del edificio”.
En el proceso de embalaje se emplearán 16.000 cajas y contendores homologados, además de casi otras mil cajas de madera que deberán fabricarse especialmente para la ocasión. Todo ello quedará custodiado en el Centro Logístico del Patrimonio Cultural de La Rinconada (Sevilla).
Tanto para el traslado como para la remodelación del edificio ha sido "fundamental" la cooperación institucional entre el Ministerio de Cultura y Deporte, que ostenta la titularidad del Museo, y la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía, gestora de la institución museística, aseguró Del Pozo.
Proyecto retrasado desde 2007
El proyecto de rehabilitación del Arqueológico de Sevilla comenzó a gestarse en 2007, cuando arrancaron las primeras gestiones entre ambas Administraciones y se redactó un plan museológico, aprobado tanto por el Ministerio como por la Consejería de Cultura. Ese documento fue "base" para el concurso de ideas convocado en 2009 para la contratación del diseño de la rehabilitación del inmueble y la modernización de sus instalaciones.
Después de que en 2010 dicho concurso fuese resuelto en favor de la propuesta presentada por el estudio Vázquez Consuegra, cuyo diseño inicial implicaría obras y mejoras por un importe de aproximadamente 36 millones de euros, Patricia del Pozo reconoció las "dificultades presupuestarias" que marcaron aquellos años (en alusión a la crisis económica de 2011) y “las medidas de austeridad a las que fueron sometidas las administraciones públicas”.
De este modo justificó que, pese a la elección del proyecto arquitectónico, la contratación de las obras de ejecución del mismo "no tuviera continuidad" en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de aquellos años —entre 2010 y 2018—. No obstante, y según ha relatado la consejera andaluza de Cultura, en mayo del año pasado finalmente fue "recuperado" el proyecto y se encomendó a Vázquez Consuegra una "modificación" del mismo, cuyo coste ha sido calculado en unos 20,7 millones, 15 menos que los presupuestados en el proyecto original. Según las nuevas previsiones, el Museo Arqueológico volverá a abrir sus puertas a finales de 2022.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.