La historia de España contada con chorros y danzas
El nuevo parque temático Puy du Fou, en Toledo, presenta un espectáculo que sobrevuela la evolución de la Península durante 15 siglos
Desde que el rey visigodo Recaredo se convirtió al catolicismo, hecho formalizado en el III Concilio de Toledo, en el año 589, hasta el comienzo de la Guerra Civil, en 1936, hay casi 15 siglos de historia de España. Contar ese largo y accidentado trecho en hora y cuarto de espectáculo audiovisual es la carta de presentación del parque temático Puy du Fou, a las afueras de Toledo. Para ello, cerca de 200 actores dan vida a 2.000 personajes enfundados en 1.200 trajes de época en un decorado de 3.900 metros cuadrados por el que cabalgan 30 caballos y se lanzan chorros de agua desde 60 surtidores. El estreno, el viernes por la noche, del espectáculo El sueño de Toledo fue seguido por unos 4.000 espectadores en las gradas, que vieron una sucesión de números en los que abundaron las coreografías, apoyadas por videoproyectores de gran resolución.
Entre los asistentes, Ángela Muñoz Fernández, profesora de Historia de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), para quien la función "es visualmente atractiva y cumple con el entretenimiento, aunque su relato se basa en numerosos estereotipos". A su lado, Gutmaro Gómez Bravo, profesor de Historia en la Universidad Complutense de Madrid, asiente y continúa: "Se mezcla historia y leyenda, tiene una línea monocroma, la historia de España no es solo el cristianismo y la idea de unidad del país".
El consejero delegado de Puy du Fou España, Erwan de la Villéon, ya lo había advertido: "No somos historiadores. Queremos que la gente salga de aquí sintiéndose orgullosa de sus antepasados". La empresa ha importado ese modelo del parque original, que, cerca de Nantes, ofrece un espectáculo a partir de la cultura francesa. En el caso español, la historia de Toledo (recreada la ciudad con su río Tajo, iglesia, las puertas de acceso, almenas y un molino...) se mezcla con la de España y se deleita en la Edad Media: atribuye la llegada de los musulmanes a la Península a la leyenda de la Cava, la historia de la joven forzada por el rey Rodrigo, lo que enfureció a su padre, el conde Don Julián, que por venganza facilita a los musulmanes la toma de Toledo.
Se mezcla historia y leyenda, tiene una línea monocroma, la historia de España no es solo el cristianismo y la idea de unidad del país Gutmaro Gómez Bravo
El show continúa con el esplendor de la Tulaytula árabe (nombre de Toledo en al-Ándalus), simplificado en un baile que se ve interrumpido con la reconquista cristiana de la ciudad y la batalla de Las Navas de Tolosa (1212). Isabel la Católica entra en escena (su esposo, el rey Fernando II de Aragón, ni se menciona) para proclamar la toma de Granada, mientras se recoge el episodio de la llegada de los cautivos cristianos del último bastión musulmán. "Este es un hecho mucho menor en comparación con la expulsión de los judíos, ese mismo año, que no se cita", apunta Muñoz, medievalista.
Los años avanzan sin claroscuros en la historia española. Una carabela emerge del río y con ella Colón. La llegada a América es resuelta con el acceso a la corte de una variopinta representación del imperio. "No se proyecta ninguna sombra sobre la conquista de América", dice la profesora. A continuación, una arista que llamó la atención de Gómez Bravo, "el rechazo a Carlos V, contra el que se cargan las tintas por ser extranjero", enarbolado por los comuneros.
La cultura tiene su corto espacio en la aparición de Cervantes, Lope de Vega y Calderón mientras se recitan pasajes de sus obras más célebres, el Quijote, El caballero de Olmedo y La vida es sueño. Los siglos vuelan, aunque hay tiempo para uno de los momentos que más gustó a la profesora Muñoz: la escena coral del pueblo toledano afanado en sus trabajos, lavanderas, escribanos, herreros... Hasta que llegan los franceses. "La Guerra de Independencia se centra en el rechazo al francés. Hay una insistencia en la narrativa de lo de dentro contra lo de fuera", lamenta Gómez Bravo.
Y entre la belleza de los chorros de agua y las danzas irrumpe el ferrocarril a ritmo de pasodoble. Ni un rey borbón se deja caer por el escenario y tras una fugaz referencia a Dalí y Alberti, el espectador se encuentra ante la Guerra Civil, casi un tuit, resuelta con "una lucha de hermano contra hermano". El colofón es un mensaje de optimismo porque los pueblos españoles vuelven a vivir en unidad.
Tras los fuegos artificiales del fin de fiesta, Gómez Bravo resumió que "debería haberse empleado un lenguaje más inclusivo y no una visión centrada en cuestiones uniformes". Ambos historiadores ven en el parque una oportunidad de promoción, empleo y turismo para Toledo. A Muñoz le gustaría, no obstante, que "aun entendiendo que estamos ante una forma de contar la historia que no puede transmitir ideas complejas, la selección bascula a un discurso tradicional, sería recomendable que rescatasen otros episodios". Gómez Bravo, cuyas líneas de investigación se han centrado en la España contemporánea, la Guerra Civil y el franquismo, sostiene que un buen final habría sido la mención a la Transición, "una página de éxito junto con la entrada en Europa, algo de lo que podemos sentirnos orgullosos", para concluir: "Más historia y menos leyenda".
Tener pasado y futuro
El estreno del espectáculo El sueño de Toledo, anunciado en radio, el metro y las redes sociales, contó con la presencia de numerosos políticos, como el presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García-Page, la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto; el presidente del PP, Pablo Casado, y la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, del PSOE. Tras los discursos de los responsables de la empresa francesa Puy du Fou, que invertirá 183 millones de euros hasta 2021 en este proyecto que crecerá con un pueblo medieval, una venta manchega y un campamento morisco, García-Page se dirigió al público para defender este parque temático de la historia de España porque "si no se sabe de dónde se viene, no se puede saber a dónde se va".
Babelia
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